La investigación abierta para determinar las circunstancias en las que lastimaron a Gael, el bebé de tres meses que terminó internado por las fracturas que sufrió en la cabeza, avanza. Desde el Juzgado de Instrucción Tres de Puerto Iguazú, a cargo de Martín Brítes, citaron a testigos, entre ellos la curandera que lo atendió el 6 de agosto y que le dijo a los padres que el nene no tenía problemas estomacales, sino que estaba muy golpeado.
Los investigadores también buscan determinar si una hermana del niño, de tres años, también sufrió violencia. Con ella trabajarán profesionales específicos.
Por el momento, siguen presos los padres de Gael, Rocío (23) y Mauro Vázquez (30), acusados del delito de «homicidio calificado en grado de tentativa».
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