Exitosa cirugía de cardiopatía congénita a una bebé de 80 días en el hospital Materno Neonatal

Con éxito se realizó ayer la tercera cirugía de cardiopatía congénita de este año en Misiones. En esta oportunidad se intervino a una niña de tan sólo 80 días de vida, de Gobernador Roca, a quien se le practicó una cirugía para cierre del conducto arterioso permeable.

La pequeña nació a las 22 semanas de gestación con 680 gramos y hoy con 1400 gramos fue intervenida con éxito. La intervención que se realizó en el Hospital Materno Neonatal, no presentó complicaciones y estuvo a cargo del doctor Rafael Niveyro, integrante del equipo de cirugía cardiovascular del Hospital Materno Neonatal y del doctor Carlos Antelo, jefe de Servicio de Cirugía Cardiovascular del Hospital Sor Ludovica de La Plata, Buenos Aires, quienes estuvieron acompañados por sus respectivos equipos.

Desde junio de 2016 a la fecha se han realizado 8 intervenciones de este tipo en la provincia.

El Ministro de Salud Pública  Wálter Villalba destacó el trabajo que vienen realizando los profesionales de Misiones junto al doctor Carlos Antelo y remarcó que este tipo de prácticas son posibles porque “tenemos la posibilidad de contar con un equipo de diagnostico pre natal que nos permite diagnosticar desde la panza de la mamá las cardiopatías congénitas y dar un tratamiento especial al embarazo, y esto nos pone a la vanguardia como provincia. La idea es mostrar confiabilidad en estas intervenciones para ir avanzando en cirugías más complejas, en principio es asegurarle a la provincia que se pueden resolver determinado casos de cardiopatías congénitas en bebes y niños”.

¿Qué es el conducto arterioso permeable?

El conducto arterioso permeable o ductus arterioso persistente es una abertura anormal entre la aorta y la arteria pulmonar del corazón del niño. Cuando el bebé se encuentra en el vientre materno, la sangre circula alrededor de los pulmones por una abertura normal llamada ducto arterioso porque el bebé recibe oxígeno de la sangre materna. Poco después del nacimiento, este conducto se cierra por sí solo porque la sangre debe pasar por los pulmones para obtener oxígeno. Cuando el ducto arterioso no se cierra solo, se conoce como conducto arterioso persistente o permeable.

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