En Posadas miles de fieles van a pedir y agradecer por “pan y trabajo” a San Cayetano

Cada 7 de agosto miles de fieles van a venerar al santo del Pan y el trabajo, ya sea para pedir o para agradecer. Este lunes, desde las 6 de la mañana comenzaron a llegar los feligreses y por la noche se espera la mayor cantidad de personas. Un dato llamativo, las donaciones en dinero fueron mayores a las del año pasado desde temprano, según comentaron las encargadas de recibirlas.

 

Miles de fieles y un mundo simbólico que se genera en torno al venerado San Cayetano, se vive en todo el país y Posadas no es ajena a este espacio espiritual. “San Cayetano siempre estuvo conmigo y mi familia”, afirma una de las miles de personas que se acercaron a la parroquia simplemente para agradecer.

Las actividades comenzaron este lunes a las 6 de la mañana, al ser un día laboral, se espera que a la tarde, “como suele ocurrir todos los años”, venga la mayor cantidad de gente. A cada hora se realiza una misa con diferentes causas como eje de la celebración. A las 16 los fieles caminarán por el barrio.

A las 22: 30 culmina este día de fe y esperanza.

Es un día donde además de las misas, los creyentes aprovechan para pedir una bendición, realizar promesas, agradecer, confesarse. Uno de los símbolos protagonistas el pan bendecido. El mismo es comprado por prácticamente todo aquel que pasa por la iglesia. “Es que San Cayetano es el santo que compartió sus bienes, por eso simbólicamente la gente viene compra y lleva para compartir con sus amigos, seres queridos”, explica uno de los vendedores. La Parroquia del Barrio Yacyertá hace 600 kilos de pan para esta día de celebración. “Todo se vende”, aseguró quien año a año se encarna de llevar este servicio a la parroquia.

Los jóvenes, también hacen lo suyo, durante todo el día asisten a las personas, informan, ayudan a los vendedores. “Somos un grupo de la parroquia, se ve mucha gente grande en celebraciones como esta, cuesta mucho sumar a los jóvenes al mundo de la fe. Ellos están interesados en otras cosas”, reconocen quienes sí optaron por seguir el camino de Dios y servir.

¿Por qué San Cayetano es el patrono del pan y del trabajo?

San Cayetano, es un santo muy popular y querido entre los comerciantes y ganaderos ya que los protege de muchos males, y sobre todo, les brinda trabajo y hace que nunca falte el pan. Se lo conoce como Santo de la Providencia, Patrono del pan y del trabajo.

Gaetano di Thiene nació en 1480 en Vicenza, cerca de Venecia, Italia. Su padre, militar, murió defendiendo la ciudad contra un ejército enemigo. El niño quedó huérfano, al cuidado de su madre.

Estudió en la Universidad de Padua donde obtuvo dos doctorados y allí sobresalía por su presencia venerable y por su bondad exquisita que le ganaba muchas amistades. Se fue después a Roma, y en esa ciudad capital llegó a ser secretario privado del Papa Julio II, y notario de la Santa Sede.

A los 33 años fue ordenado sacerdote. En Roma se inscribió en una asociación llamada “Del Amor Divino”, cuyos socios se esmeraban por llevar una vida lo más fervorosa posible y por dedicarse a ayudar a los pobres y a los enfermos. Al tiempo fundó la comunidad de sacerdotes Padres Teatinos.

San Cayetano era de una familia muy adinerada, pero él se desprendió de todos sus bienes y los repartió entre los pobres “Veo a mi Cristo pobre, ¿y yo me atreveré a seguir viviendo como rico? Veo a mi Cristo humillado y despreciado, ¿y seguiré deseando que me rindan honores? Oh, que ganas siento de llorar al ver que las gentes no sienten deseos de imitar al Redentor Crucificado” dijo Cayetano en una carta explicando sus motivos por los cuales dejó de lado el dinero.

Además, fundó asociaciones llamadas “Montes de piedad” en donde se dedicaban a prestar dinero a gentes muy pobres con bajísimos intereses. También ayudaba a los enfermos en los hospitales, especialmente a los más abandonados.

Un día en su casa no había nada para comer porque habían repartido todo entre los pobres  y Cayetano se dirigió al altar, precisamente en la puerta del Sagrario donde estaban las Santas Hostias, dijo: “Jesús amado, te recuerdo que no tenemos hoy nada para comer”. Al ratito llegaron unas mulas con gran cantidad de provisiones, y los arrieros no quisieron decir de dónde las enviaban.

Finalmente, un 7 de agosto del año 1547, a sus 67 años, Cayetano fallece en Nápoles. Cayetano fue beatificado el 8 de octubre de 1629 por el papa Urbano VIII y canonizado el 12 de abril de 1671 por el papa Clemente X. Desde entonces, la Iglesia Católica lo reconoce como San Cayetano, el santo de la Providencia, Patrono del pan y del trabajo.

 

LA REGION

NACIONALES

INTERNACIONALES

ULTIMAS NOTICIAS

Newsletter

Columnas