Pese a que el invierno comenzó hace algunas semanas, las bajas temperaturas continúan haciéndose esperar, complicando el panorama para los próximos meses ante el inminente peligro que representa el dengue para toda la comunidad. Uno de los principales focos que hacen propicios los criaderos de mosquitos son los elementos que la gente guarda como recuerdo en lugares al aire libre, según explicó Fabián Zelaya, director de Vigilancia Epidemiológica y Control de Vectores de la Municipalidad de Posadas.
Fabián Zelaya. LT 17.
“La gente guarda apego con elementos pero en lugar de resguardarlos en lugares cerrados lo que hace es dejarlos, en muchos casos arrojados incluso, en el patio de su vivienda. Lo que se hace con el equipo interdisciplinario de trabajo de la municipalidad es concientizar, si bien puede quedarse con ese recuerdo, se sugiere que lo coloque boca abajo para evitar la acumulación de agua”, dijo el funcionario municipal.
Por otra parte Zelaya explicó que, se trabaja durante todo el año para evitar criaderos, teniendo una agenda de trabajo mensual priorizando aquellos lugares en donde los focos infecciosos son abundantes.
“Uno de los lugares que visitamos siempre es el cementerio de la ciudad donde, si bien no podemos deshacernos de los floreros, lo que hacemos es colocar un polvo en el agua de las flores que evita que esa agua sea utilizada como larvario de mosquitos. Otro de los lugares que visitamos mensualmente son las gomerías, en la ciudad de Posadas hay alrededor de 100 gomerías, y extraemos todo lo que ya no utilizan”.
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