Estaba estacionada en la avenida Andrés Guacurarí. Según testigos, “se puso en marcha” sola ya que no tenía conductor. Circuló varios metros, atropelló el edificio policial provocándole roturas y “cayó» en plena dependencia.
El portal Irigoyen Informa dice que el vehículo pertenece a un comerciante y que por poco no causó una tragedia ya que se trata de una de las arterias principales de esa ciudad misionera
(Irigoyen Informa)