Instaló una vivienda precaria en la isla del arroyo Mártires, debajo del puente que tiene conexión entre el barrio Villa Cabello y la costanera de Posadas. Llama la atención que estando tan cercano a la costa y a la ciudad, igual lleva una vida literalmente “asilada”, sin servicios básicos (agua potable, luz eléctrica), sin conexión.
Desde hace más de dos años, un hombre decidió cambiar el rumbo de su vida e irse a vivir solo en una especie de isla ubicada en el arroyo Mártires.
Allí, es imposible la llegada de los servicios básicos. Un bote es su movilidad, para llegar a la costa cuando así lo desea.
Su patrimonio, al menos visible, una casa improvisada entre lonas, madera y alguna que otra chapa. El hombre pasa sus días al lado de la precaria vivienda además de un pequeño bote que lo traslada hasta la orilla.
Intrigados por cómo llegó a este lugar y optó por quedarse en medio del agua, la luz del sol y la luna por las noches, es que este medio intentó en reiteradas oportunidades dialogar con el isleño, pero no quiso hablar, su decisión de no comunicar-se tendrá las mismas razones que lo llevó a instalarse en el lugar.