Bomberos voluntarios: ejemplo de vocación de servicio y tarea humanitaria que fortalecen con fuerte entrenamiento

 

 

Salvan vidas, bienes materiales, asisten en los incendios grandes o pequeños de viviendas, edificios o zonas rurales, actúan en casos de accidentes viales, en las inundaciones y cada vez más en las diversas situaciones de desastres naturales, ayudando a los refugiados, escuchando a las víctimas, conteniendo «dolores ajenos». Son los primeros en llegar y los últimos en irse del lugar de un siniestro.

Son un ejemplo de vocación de servicio, lo llevan en su ADN, son solidarios, pero a su vez se entrenan duro para ser profesionales en los rescates cotidianos que deben enfrentar. Son personas únicas y especiales cada uno de ellos. Son Bomberos Voluntarios. Héroes invisibles de las emergencias cotidianas.

 

El 2 de junio se cumplió 133 años de la fundación del primer cuartel en el país, y se celebró el “Día Nacional del Bombero Voluntario”. En la Argentina son más de 43 mil, entre hombres y mujeres. Y el próximo 10 de junio festejarán a lo grande con la comunidad, en un mega-evento que organizan en el Rosedal de Palermo, ubicado en Avenida del Libertador y Avenida Sarmiento de la ciudad de Buenos Aires, para celebrar con la presencia de más de 600 bomberos voluntarios de diversas asociaciones del país y 100 autobombas que se desplazarán desde sus provincias hasta la Capital Federal. Allí realizarán una exposición con carpas, vehículos y herramientas, exhibirán sus materiales y realizarán demostraciones para grandes y chicos.  Se trata de un encuentro promovido por el Consejo Nacional de Bomberos de la República Argentina para valorizar el trabajo que estos hombres realizan en distintos puntos del país.

 

El presidente de la Federación Misiones de Bomberos Voluntarios y de la Asociación de Bomberos Voluntarios de Montecarlo -miembro del Consejo Nacional de Bomberos Voluntarios-, Waldemar Laumann, dialogó con FM Libertad sobre el escenario actual que enfrentan en la provincia para llevar adelante su tarea, el trabajo de fortalecimiento institucional que realizan para consolidar la Academia de Capacitación Provincial de Bomberos Voluntarios y los desafíos a futuro para ser «cada vez mejores» en la actuación de emergencias.

 

En Montecarlo, esta asociación tiene 42 bomberos voluntarios activos, 8 aspirantes y 28 cadetes. En tanto, entre las 31 asociaciones de la provincia adheridas a la Federación Misionera hay un total de 1.034 bomberos voluntarios activos.

 

“Nuestra Federación está abocada a dos facetas que son importantes, por un lado la gestión administrativa para la generación de recursos económicos y planificación del trabajo; y por otro lado, el fortalecimiento de la Academia Provincial de Capacitación de Bomberos Voluntarios. Estos dos temas deben venir de la mano, ya que es inútil tener tecnología de punta cuando el personal no está preparado para poder usarlo en situaciones de riesgo. Por eso es que venimos trabajando muy bien con la academia en todo lo que es capacitación. Tenemos instructores a nivel nacional e internacional, que están capacitando en todo el país. Contamos con instructores que se recibieron en Estados Unidos en Comando de Incidentes, en Italia se especializaron en Materiales Peligrosos, también contamos con instructores en Socorrismo. Los profesionales dictan programas de capacitación en todo el país, es decir que el nivel que tenemos es muy bueno. Esto nos da una pauta que estamos por buen camino”, remarcó en la entrevista Laumann.

 

En la tarea diaria, en lo que más intervienen es en socorrer a las víctimas de accidentes viales. Al ser consultado sobre cuales serían las situaciones que más observan, desde imprudencia o negligencia, respondió: “Creo que esto se debe un poco a la desidia de los mismos conductores en general, por no tomar los recaudos que corresponden cuando salen a la Ruta 12 o Ruta 14 , que están más peligrosas por las condiciones climáticas y -de todas formas- circulan con exceso de velocidad. Creo que los conductores muchas veces se revelan solo por no dar la razón a las autoridades viales. Otras situaciones se dan por el consumo de alcohol, algo que vemos muy seguido en los accidentes. En este sentido, en la medida que las multas no sean mayores y extremas en cuanto a la sanción, no se modificarán las cosas. El punto es que el auto se recupera, la multa se paga, pero la vida de una persona no se recupera nunca más. O quedan con secuelas para toda la vida”, reflexionó Laumann.

 

Sobre la situación más difícil y triste que le tocó enfrentar, recordó un hecho que sucedió hace casi tres años, cuando asistió a un accidente vial donde murió un menor de dos años. “Es muy fuerte, nosotros somos de carne y hueso, impacta, también nos quebramos ante estos hechos. No es tan fácil seguir adelante con el dolor ajeno, pero lo hacemos acompañados de un equipo de profesionales que nos ayudan a liberarnos de las penas de los otros, ya que en este servicio uno convive con el dolor ajeno”, explicó.

 

 

Hacia el sueño de la sede propia

 

Por otra parte, el presidente de la Federación Misionera se refirió al proyecto que tienen en marcha con la construcción de la sede propia con base en Montecarlo. “Tenemos una administración seria y transparente, y el manejo de los recursos nos permite ir avanzando en la obra de construcción de un predio de 3 pisos, que contará con diferentes espacios, desde subsuelo, depósito, salón de capacitación, sala de reuniones, cocina centralizada, área de administración, con capacidad para 70 personas que estén en entrenamiento”, detalló.

 

La sede estará disponible para las actividades programadas por la Federación para todas las asociaciones afiliadas. “No tenemos fecha para terminar la obra, ya que estamos avanzando en la medida que ingresan aportes y recursos que llegan desde las 31 asociaciones que están afiliadas en la provincia. Pero iremos avanzando en el proyecto, poco a poco, en la medida que ingresan los aportes”, expresó el directivo misionero.

 

Para la construcción recibieron una ayuda del gobierno nacional, y gestionarán un pedido ante el gobierno provincial para “avanzar en todo lo que es el cerramiento del edificio. Hoy tenemos todo parado, sumado al clima que no ayuda, pero intentaremos terminar la obra lo antes posible ya que nos permitirá centralizar las capacitaciones”, explicó.

 

En la actualidad dictan cursos en varias localidades. “En Oberá se realizó hace algunas semanas un curso sobre materiales peligrosos Nivel 1 y Nivel 2, que estuvo a cargo del  jefe de Bomberos Voluntarios de la localidad, que es instructor y especialista en este tema. Además, es quien capacita a todos los bomberos de la provincia. En San Pedro también tenemos un simulador de incendio, que se usa para la capacitación de bomberos”, relató el directivo.

 

En general, el mes de diciembre de cada año es cuando se reúnen para definir el calendario de capacitación anual y así planifican las actividades del año.

 

 

Vocación de servicio, principal requisito

 

Toda aquella persona, hombre o mujer, que quiera sumarse como Bombero Voluntario y unirse a alguna asociación de la provincia, lo primero que debe tener claro es que el principal requisito es la vocación de servicio hacia el prójimo. Después cumplir ciertos requisitos y evaluaciones psico-físicas para ser aspirante a Bombero Voluntario, superando otras etapas hasta lograr aprobar las pruebas necesarias para ser finalmente ascendido a Bombero Voluntario.

 

Así lo explicó el directivo e invitó a todo aquel interesado en unirse como voluntario que se acerque a la sede más cercana a su comunidad. “Quien esté interesado en ser bombero voluntario debe apersonarse a la Estación de Bomberos de su interés. Previo a la visita, podrá averiguar si hay cupo, y qué día y a qué hora es la reunión de bomberos voluntarios”, indicó.

 

Deberán ser mayores de 18 años, formalizar la ficha de inscripción para su reincorporación, presentar los resultados del estudio psicofísico y durante un año realizar actividades como aspirante. “La academia tiene una nivelación para todos los aspirantes donde se brinda conocimientos de las técnicas básicas, después viene la prueba más difícil donde se le da entrenamiento para que tengan los conocimientos elementales para salvar vidas, asistir en incendios y situaciones extremas. Una vez superada esta etapa, recién realiza el examen de nivelación para ser ascendido a bombero voluntario. Son muchas condiciones las que se consideran, pero lo más importante es la vocación de servicio, un requisito ineludible pero es algo que lo lleva el individuo. Uno nace con eso, no hay forma de explicar, enseñar, ni de transferir. Esto es algo que lo distingue, ya que cuando todos corren del siniestro, el bombero va hacia él. Es algo que lo hacemos con vocación de servicio, es lo que nos mueve: ayudar a la gente, salvar vidas”, remarcó Laumann.

 

En la provincia están muy bien organizados, realizan capacitaciones permanentes a nivel provincial y nacional. “Nosotros también dependemos del Consejo Nacional de Bomberos Voluntarios de la República Argentina, que depende del Ministerio de Defensa de la Nación. Todo lo que hacemos está regulado bajo  la Ley Nac. 25.054 que regula el movimiento de bombero a nivel país, como también tenemos una norma provincial que regula todas nuestras actividades en Misiones”, precisó el presidente de la federación misionera.

 

Disponer de hasta lo que no se tiene

 

Otro aspecto vital que comentó el representante de los Bomberos Voluntarios de la provincia fue que muchas veces la comunidad mal entiende que por ser “voluntario” se tiene todo los recursos, desde combustible, indumentarias, equipos y demás. “Esto no es así, somos voluntarios como individuos, como personas, como seres humanos, nos ponemos a disposición y nos entrenamos para poder hacer frente a las diversas situaciones de siniestros. No cobramos un sueldo por ir a las tragedias o servicio específico, pero nuestros cuarteles son las casas de familia, y los recursos materiales se necesitan. Hay que pagar la luz, el combustible, el servicio técnico de la autobomba, hay que pagar el seguro, no tenemos gratuito nada. Nosotros también damos cobertura de seguro por los bomberos activos, para dar tranquilidad de sus familias ya que no estamos exentos de tener un accidente en algún servicio. Todos son costos que absorben las asociaciones. Por eso, tanto la actividad administrativa como la directiva deben funcionar en forma de engranaje para que todo esté bien», afirmó.

 

Esta semana, del gobierno de Misiones recibieron un subsidio para la Federación Misiones de Bomberos Voluntarios. «Estos fondos se repartirán en forma equitativa con las 31 asociaciones, son 110 mil pesos para la compra de elementos de lucha contra incendios y protección personal.  El 10 y 11 de junio, realizaremos una reunión en la sede de la Federación en Montecarlo, de la que participarán las dos empresas proveedoras de los equipos para que las delegaciones puedan elegir lo que necesitan y ver el listado de precios, hasta que lleguen al monto de 110 mil pesos. Después se hace la transferencia a los proveedores y en 45 días se entrega toda la mercadería. Es una ayuda, a veces puede ser poco, pero hay que conformarse y salir adelante, no siempre el Estado es el que debe aportar, con la ayuda de las asociaciones, ONG y la comunidad se puede generar más recursos para el fortalecimiento institucional que es beneficio para todos”, concluyó.

 

 

Por Patricia Escobar 

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