La joven de 18 años que presenció el crimen de su madre reveló un dato clave

Los delincuentes buscaban a la ex pareja de la víctima, dueño de una feria de ropa, pero no estaba y huyeron con 20 mil pesos. La asesinaron frente a su hija de 18 años. Sucedió en la localidad bonaerense de Marcos Paz.Una mujer fue asesinada de un balazo en la cabeza con su propia arma y frente a su hija por tres delincuentes que ingresaron a su casa de la localidad bonaerense de Marcos Paz y robaron 20.000 pesos, informaron hoy fuentes judiciales y policiales.

Al momento del crimen también se encontraba en la casa el hijo menor de la víctima, de 7 años, cuyo padre es el hombre al que los delincuentes buscaban bajo el apodo de «Pitufo» cuando irrumpieron en la vivienda en busca de dinero.

El hecho ocurrió el domingo al mediodía en una casa de la calle Misiones 99, casi esquina Melgar, de ese partido del oeste del conurbano bonaerense,  y la víctima fue identificada como Patricia Grieshaber, quien recibió un balazo en la cabeza y murió minutos después de ser atendida en el hospital de Morón.
Según las fuentes, todo comenzó cuando Grieshaber estaba junto a su hija y su hijo y fueron sorprendidos por tres delincuentes que ingresaron a su casa.

«Veo que entra la perra con la boca con sangre y lo primeo que dije fue atacó a un perro. Pero cuando fui a atarla los veo que entraban (a los delincuentes) y corrí a buscar a mi hermanito», relató a la prensa Lucía, la hija mayor de la víctima y testigo del episodio.

Los tres asaltantes irrumpieron entonces en la casa y a los gritos comenzaron a preguntar por «Pitufo», en referencia a la ex pareja de Grieshaber y padre del menor de sus hijos, Oscar Alberto Báez, de 40 años, de quien querían, según dijeron «la plata de la droga».

Voceros judiciales explicaron a Télam que Báez es dueño de una feria de Mariano Acosta, «El Gauchito Gil», y que alquila los puestos, aunque era su ex mujer la encargada de administrarlo y realizar las cobranzas.

Por ese motivo, la principal hipótesis que se sigue es que los delincuentes lo conocían de ese ámbito y sabían que en la casa de su ex mujer había dinero, agregaron los informantes.

«Es una persona muy cercana, que sabe perfectamente bien cómo nos manejamos en mi casa», había denunciado la joven de 18 años en diálogo con varios medios televisivos.

Ante las amenazas, la dueña de casa les entregó 20.000 pesos, aunque los hombres comenzaron a revisar distintos armarios de la casa y los cajones.

Según las fuentes judiciales, uno de ellos, al abrir un cajón, encontró una pistola Bersa calibre 9 milímetros de la mujer y quiso llevársela, momento en que ésta se resistió y forcejeó con él.

La hija de Grieshaber relató que en esa lucha el propio delincuente gatilló y un balazo lo hirió en el pie, tras lo cual, con la misma pistola, ejecutó a su madre de un tiro en la cabeza.

«El mismo delincuente se disparó y dijo que mi mamá le había disparado y no fue así. Yo vi cuando se disparó y después le disparó a mi mamá con la misma arma. La dejan caer, no me dejaron levantarla ni nada y cuando quise salir a pedir ayuda me dijeron ‘volvete porque te matamos a vos también'», recordó la jóven.

Tras el crimen, los delincuentes escaparon a bordo de un auto Audi A4 que pertenecía a la mujer asesinada y en una camioneta Ford F100 gris plata -con patente perteneciente a una Renault pero sin pedido de secuestro- en la que habían llegado, la cual quedó grabada por varias cámaras de seguridad.

El Audi fue hallado en las últimas horas en el cruce de las calles Constituyentes y Larrea, de Morón, y fue secuestrado para ser sometido a peritajes.

El fiscal 3 de Mercedes a cargo de la causa, Pedro Illanes, tomó declaración a la hija y a la ex pareja dela víctima y dispuso diversas diligencias para dar con los criminales, entre ellas la confección de un dictado de rostro en base a los dichos de Lucía, quien dijo haberle visto la cara a uno de ellos y haberlo reconocido como alguien vinculado a la feria de su padrastro.

Según la joven, si bien los tres «estaban encapuchados» logró verle la cara a uno al correrle lo que llevaba puesto y pudo reconocer a otros dos «por los ojos».

Lucía agregó que los tres estaban amados, que amenazaron con llevarse cautivo a su hermanito aunque ella se los impidió y que a su criterio es gente «cercana» a la familia.

«Lo que sabemos es que es gente muy cercana, que sabe perfectamente cómo nos manejamos en mi casa. que ha sabido como funcionaba al auto, porque el auto ese tenía sus dificultades, una forma de freno de mano que había que sacar apretando un freno de pie, era muy difícil para poner en marcha y esa persona sabía perfectamente», expresó la chica.

Lucía negó además que estuvieran vinculados a la venta de droga, dijo que se encargaban de la cobranza de los puestos y admitió tener una buena relación en la ex pareja de su madre, Pitufo, a quien ve seguido por tratarse del padre de su hermano menor.

La joven agregó que tiempo atrás habían sufrido amenazas, aunque no aportó a la prensa detalles al respecto.

«Había una persona de la feria que se nos hacía el muy amigo, sobre todo de la ex pareja de mi mamá, pero no sé bien que problema hubo», agregó Lucía, quien dijo que para ella el crimen puede estar vinculado tanto a una cuestión de dinero como una venganza.

LA REGION

NACIONALES

INTERNACIONALES

ULTIMAS NOTICIAS

Newsletter

Columnas