Las selfies irrumpieron de la mano de los teléfonos inteligentes como una buena forma de vender apariencias. Sea para tener una buena foto de perfil o cualquier otro caso, los que se prestan a este tipo de fotografías necesitan aparecer espléndidos.
Para lograr esa condición resulta necesario cumplir con unos ciertos requerimientos en cuanto a iluminación, el ángulo de la cámara y la pose a la hora de tomarse una selfie, entre otras cuestiones, según publicó hoy el sitio especializado The Verge.
Cuidado con los ángulos
Posiblemente la parte controvertida de la selfie es la relación entre a posición del rostro y la cámara. Las fotos se verán mejor si el teléfono está enfocado levemente hacia abajo. La sutileza es clave.
La luz natural, prioridad
De ser posible, los especialistas recomiendan ubicarse cerca de una ventana o al menos al alcance de la luz solar. Esto ilumina el rostro, disimula las imperfecciones y minimiza las sombras. Al igual que la luz de una vela, el flash de Snapchat, que enciende la pantalla en lugar de activarlo en el teléfono, también es una buena opción. Hay que tratar de evitar la luz áspera de su teléfono.
La posición del rostro
Cada uno sabe cuál es su mejor perfil a la hora de tomarse una selfie. Si aún no lo tenés en claro, inclinar la cabeza a un lado y hacia abajo levemente puede resultar un buen recurso.
Los especialistas recomiendan alejar tanto como sea posible la cámara de la cara, ya que los primeros planos tienden a «aplastar» dejar a las personas más gordas de lo que son, y no inclinar el dispositivo. No así el caso de Eugenía Suarez, una asidua a las selfies, por ejemplo.
Los filtros
Los especialistas ponderan lo natural, por ende no recomiendan editar las selfies si contamos con una iluminación apropiada. No obstante, se puede optar por utilizar el modo belleza -como los Huawei, por ejemplo- para no dejar ninguna imperfección librada al azar.
Pleno conocimiento de la cámara
Es interesante que dominemos las posibilidades que nos ofrece la cámara fotográfica de nuestro teléfono. Si contamos con un celular que tiene un modo manual, lo mejor es probarlo a fondo y aprender cómo funciona.
El función HDR (modo de alto rango dinámico) puede resultar interesante, pero no hay que abusar. Es ideal para fotografías de paisajes, ya que se destaca por buscar abarcar el mayor rango posible de niveles de exposición en todas las zonas de la composición de la imagen. Sin embargo, su uso excesivo puede derivar en que buenas fotografías se conviertan en desastres cromáticos.
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