Mónica es mamá del menor de 14 años que intentó suicidarse jugando al juego de la Ballena Azul. La mujer habló desde donde se encuentra internado su hijo.
«Sabía que existía el juego pero no me imaginé nunca que él sería capaz de hacer una cosa así. Nosotros cuando nos enteramos de eso le dijimos que tuviera cuidado con ese juego porque era muy peligroso», explicó Mónica.
Según la mujer, inclusive, su hijo le respondió «mami yo jamás lo jugaría porque es satánico». La familia del menor es muy creyente y pertenecen a una Iglesia Evangélica por lo que dicen «siempre estuvo muy contenido».
Mónica no sabe qué motivo pudo llevar a su hijo a tomar tan drástica decisión y aseguró que hace unos meses sus hijos de Mendoza le advirtieron sobre el juego.
«Yo no manejo la tecnología pero me llamaron mis hijos de Mendoza para decirme que andaba eso en el Facebook y que hablara con él y yo hablé», comentó.
El menor intentó matarse tomando un blíster de medicamentos para el páncreas, que según Mónica le recetaron a ella «el año pasado».
«La noche que se lo tomó (el lunes) estuvo con nosotros comiendo y contento, lo mandé a dormir como a la una de la mañana y a las pastillas se las tomó a las dos», relató la mujer.
Al día siguiente Mónica intentó despertar a su hijo para ir a la escuela y se dio cuenta de que estaba descompensado. «Estaba pálido, intenté reanimarlo pero no pudimos así que lo trajimos directamente al Hospital Rawson», explicó.
Ahora, el menor se recupera en Terapia Intensiva donde le hicieron lavaje de estómago y, según su madre, «ya está fuera de peligro».
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