Las cardiopatías congénitas son las malformaciones más frecuentes en los bebés y deben ser diagnosticadas a tiempo

El doctor Lisandro Benmaor, actual Ministro de Desarrollo Social de la provincia y especialista en patologías cardiológicas de los niños, explicó la importancia de la detección temprana de este tipo de afecciones que se dan desde el embarazo, y es durante ese periodo, donde deben ser descubiertas.

La principal es la cardiopatía congénita, que es la malformación del corazoncito, de alguna de sus cavidades, valvulitas o arterias. Esa malformación ocurre desde antes del nacimiento, o sea en la panza. Esto es muy frecuente y peligroso. Tal es así que es la malformación congénita mas frecuente que existe. Uno de cada cien recién nacidos vivos, tiene una cardiopatía congénita.

Muchos bebés, por estas cardiopatías, mueren en la panza antes de nacer. Se estima que son cinco de cada cien, los fetos que fallecen.

Son peligrosas, porque muchas de esas patologías requieren de una cirugía. Y la operación del corazón a un bebé, debe hacerse en un centro de altísima complejidad. Por eso esta cardiopatía es responsable del 10% de las muertes infantiles.

Benmaor resaltó por tanto la importancia del diagnóstico precoz, intrauterino, mientras la mamá está embarazada. El estudio se llama Eco cardiografía fetal. Y Misiones es la primera provincia del país, en contar con una ley que hace obligatoria la realización de este estudio, a partir de la semana 18.

Sirve para ver el corazón del feto y si se detecta una anormalidad, de acuerdo a cual sea esa mal formación, tomar los pertinentes controles, determinar donde va a nacer, e informar a los padres sobre el problema y tratamiento.

Es muy importante la detección ya en el feto, porque si el niño nace, y recién allí se le diagnostica una cardiopatía congénita, es una noticia brutal, donde los padres se enteran que el chico debe ser operado en menos de 24 horas, que se depende de conseguir cama en Buenos Aires, y que se necesita un avión sanitario para el traslado.

De acuerdo a la estadística realizada en el hospital Italiano en Buenos Aires, comparando los diagnósticos intrauterinos, y los que son diagnósticos tardíos, la ventaja es de mil a uno, en todo sentido.

Cuando se detecta en la panza de la mamá se lo hace nacer al bebé en un centro de alta complejidad, donde ya al nacer, se lo opera. Ese chico en una semana estará en su casa tomando teta.

Mientras que el otro chico con un diagnostico tardío, que nace en un lugar lejano, se deberá trasladar en un avión sanitario, conseguir cama, ponerle drogas carísimas, se lo tiene que intubar durante el viaje y la espera. Luego cuando llega al centro de atención compleja hay que compensarlo: Esa operación es más compleja y también el pos quirúrgico es más traumático: Sin contar que el tiempo de internación posterior se quintuplica.

Volviendo al estudio que es clave para detectar la afección, se llama eco cardiografía fetal, y se debe hacer a partir de la semana 18 a 20, que en mes de embarazo sería en el mes número cinco. En ese estudio que se llama morfológico- detallada, se puede ver órgano por órgano, entre ellos el corazón.

Esta ecografía en Misiones es obligatoria y las madres deben saber que si sus médicos no se la pidieron, deben exigirla.

Controles médicos pre deportes
Es absolutamente necesario que haya controles pediátricos, o cardiológico pediátricos, y en estos controles debe haber un buen interrogatorio a los padres. Porque no es lo mismo el hijo de padres sanos, que un niño hijo de padres que alguno haya tenido un infarto, o hipertensión, o algún familiar que murió de muerte súbita. Ese chico es de control estricto, hay que hacerle un electro cardiograma, un eco cardiograma, y si es más grande, una ergometria también. Todo eso antes de darle un certificado de apto para educación física o deportes.
Lisandro Benmaor – Misiones Online/Radio Libertad

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