El show terminó de manera abrupta. La tormenta partió a la mitad una pantalla gigante, voló un techo y tiró una parrilla de luces. Hubo algunos heridos leves
A ocos minutos de iniciado el espectáculo “Reflejos de mi Ciudad”, en el Parque Central, se desató una fuerte tormenta que impidió la continuidad de la Fiesta de Ciudad, luego de la previa normal en un escenario que lucía impactante.
Las fuertes ráfagas de viento, poco después de las 22, y la intensa lluvia obligaron a los músicos de la Orquesta Sinfónica, bailarines y actores a abandonar el escenario, que se destruyó casi por completo.
La estructura del techo del escenario secundario donde estaban los músicos voló en su totalidad y, luego, la gran pantalla que proyectaba un mapping en el centro se destruyó absolutamente.
Afortunadamente no hubo heridos, aunque el servicio de emergencias asistió a algunas personas que resultaron lastimadas por estos incidentes.
Para ese entonces, el público, apostado en los jardines del espacio verde, comenzó a correr en busca de un refugio debajo de árboles y gazebos.
Preventores de la Municipalidad acompañaron y guiaron a candidatas, reinas electas, Reina y Virreina nacionales, quienes se resguardaron debajo de una estructura en construcción, al lado del lago, y en el puente sobre calle Mitre, junto a artistas, técnicos, municipales y familias enteras. La Nave Universitaria también sirvió de refugio de funcionarios, invitados y artistas.
Algunos osados, con una tormenta que no daba tregua, emprendieron el retorno, a pie o en autos. Sin embargo, la gran mayoría de los presentes quedó al resguardo en el predio hasta pasada la medianoche, observando cómo la tormenta terminaba de dañar el escenario vendimial.
Nervios, llantos y enojos
Una gran estructura en construcción, a metros del lago del Parque Central, sirvió de reparo para los presentes.
Allí estuvieron algunas candidatas de Ciudad, junto a sus familias. Pasadas por agua, las representantes se mostraron tristes y a la vez muy nerviosas, como muchos niños que lloraban desconsoladamente por el momento vivido.
“Cuando comenzaron a caer las primeras gotas nos pidieron que nos levantáramos de nuestro lugar y fuéramos al costado del escenario. Pero como el lugar era tan inseguro, nos trajeron a este techo”, comentaron las candidatas distritales, algunas descalzas y con los vestidos recogidos.
Los músicos, que también quedaron dispersos en distintos lugares, transmitieron preocupación y enojo: “El techo del escenario era muy débil; de otra manera no se podría haber volado así”, dijeron.
Preocupados por los instrumentos, los artistas abandonaron sus puestos sin esperar ninguna orden y mientras el espectáculo seguía en pie. “Por suerte decidimos pararnos, porque de lo contrario nos hubiera caído el techo encima”, dijeron.
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