El viernes a la madrugada, una mujer de 39 años de Villa 9 de Julio, Tucumán llegó hasta la guardia del Hospital de Niños con su hijo de 13. Allí, pasada la medianoche, explicó que quería que un médico revisara al menor de edad porque sospechaba que alguien lo había violado.
Mientras el adolescente era revisado, la mujer le comentó al personal de Policía de ese hospital que el abuso se habría producido algunas horas antes. Si bien no tenía más detalles para brindar sobre el hecho, señaló que en ese momento el menor estaba en la casa de su padre, en el barrio 11 de Febrero.
Poco después, todos supieron el diagnóstico del médico de guardia: “sospecha de abuso sexual”. El caso pasó inmediatamente al despacho de la fiscalía III° -a cargo de María del Carmen Reuter- que está de turno durante el segundo periodo de la feria judicial.
Este no fue el único abuso sexual a un menor de edad que trascendió el viernes. También se supo que una mujer de Concepción denunció ante la Policía que su hija de 15 años llevaba una década sufriendo abusos sexuales por parte de sus primos. También señaló que la única persona que sabía de esto era su abuela materna, pero esta la habría obligado a no decir nada.
