En los últimos días Closs agitó el debate energético en Misiones con un mensaje que publicó a través de redes sociales en los que advirtió sobre un dilema que envuelve a la discusión sobre hidroenergía y biomasa. No revela sus preferencias, pero pide que haya honestidad política a la hora de defender posturas.
“Es bueno continuar la discusión aunque cambien los actores. Éramos Goobierno, dejamos de serlo, los que no eran nada, ahora son Gobierno nacional. Aceptemos todos que en Misiones existe un enorme rechazo a la construcción de represas, superior al 70 por ciento. Aceptemos todos que existe en Misiones, con un discurso prearmado, que no hace falta represas, porque vamos a generar energías alternativas, básicamente con biomasa. Son afirmaciones que se escuchan en cada debate”, explica.
“No más represas con la cantidad de madera que tenemos”, dicen.
“El no a las represas es motorizado por fuerzas políticas, todas identificables por fuera del espacio de la Renovación y hoy vinculadas a Macri”, señala el diputado nacional.
“Pero ¿qué pasó? Cuando se reúne Michel Temer, recién asumido después del impeachment a Dilma Rousseff y pacta su reunión con Macri, dos presidentes recién asumidos, vuelven a decir que el complejo Garabí-Panambí es una prioridad. Como lo hicieron todos los otros presidentes de otros espacios políticos. Pero si esto hubiera ocurrido hace dos años, los espacios opositores a la Renovación, no hablo de los ambientalistas, hubieran hecho un escándalo. La Unión Cívica Radical hubiera convocado a una Convención en Alba Posse. Ahora, ¿qué pasó que no convocaron a nada?”, se pregunta.
“No seamos oportunistas, discutamos la necesidad o no de las represas sin mirar la cara del Presidente, porque no es que la represa que tiene impactos ambientales, va a morigerar el impacto porque la hace Macri y no Dilma y Cristina”, argumenta.
Acto seguido, apunta otro dato. “En la licitación de Renovar, sobre energías alternativas, la biomasa brilló por su ausencia. Hubo solo un proyecto, ya existente, que es una ampliación de una empresa privada y los costos no le dan”, indicó.
“¿Quien va a poner la plata para la inversión por biomasa? ¿Cuánto cuesta cada mega? ¿Quién analiza el costo de transporte de la energía de biomasa?”, se pregunta.
“Si la provincia va a oponerse a las represas, ahora parece que con menos fuerza porque las plantea Macri, debiera tener un enorme compromiso público, privado, ambiental, para que existan propuestas e inversores concretos en biomasa”, explica el ex gobernador.
“Esta afirmación de no a las represas y si a la biomasa, en los últimos días, tuvo dos sacudones. Los paladines de la política que siempre se opusieron, brillaron por su ausencia ante el anuncio de Macri. Los que se llenan la boca con la biomasa, también brillaron por su ausencia para mejorar el precio de la biomasa.
La energía solar y la eólica solo necesitan de inversión inicial y un poco de mantenimiento. La biomasa es inversión inicial, el transporte, personal de cargas, kilómetros de distancia. Hay un enorme costo. Si están dispuestos a pagar cien por el megawatio de energía eólica, que paguen cien el mega más el costo de la biomasa”, inquirió.
Closs: “Gracias a nuestra intervención la reforma política salió mejorada”
