La celebración religiosa en la iglesia evangélica “Asamblea de Dios” del barrio San Lorenzo de Montecarlo transcurría con normalidad, cuando imprevistamente, anoche a las 20 aproximadamente, irrumpió descontrolado Carlos V. (24) un conocido ocasional de los fieles.
El muchacho, portando un hacha, dañó nueve ventanas (de vidrio) del templo y además cargó contra cuatro automóviles: un Chevrolet Onix, VW Gol, Chevrolet Corsa y un Renault 12. Una moto Mondial 150 CC tampoco escapó a la ferocidad del joven conocido como “Carlinho”.
Miembros de la iglesia quisieron calmar al joven. Pero lejos de tranquilizarse, siguió envuelto en ira. A Mateo A. (69) me rompió el tabique de un puñetazo y a David K. le asestó un ladrillazo en la espalda.
Luego Carlos V. salió a correr y a pocas cuadras de la iglesia, situada en calles San Ramón y Santa Lucía, fue reducido por efectivos de la comisaría y Comando de Montecarlo, respectivamente.
Orinaba en la calle y cuando se lo recriminaron enfrentó a la Policía con un nunchaku, a lo ninja
