El vínculo con los canes nació hace 10 mil años. La ciencia reveló que sus genes los predisponen para convertirse en un integrante de la familia. Por qué hoy se conmemora su día.
Los humanos y los perros llevan una historia juntos de más de 10 mil años. Y por la relación que han establecido, son considerados ‘mejores amigos’. Pero detrás de esta cariñosa denominación, hay una explicación científica que lo comprueba: la respuesta está en los genes.
Un estudio reciente de la Universidad de Emory en Estados Unidos reveló que un área del cerebro de los canes permite reconocer rostros de forma similar a lo que ocurre en primates. Pero este nuevo hallazgo no es el único que convierte a estas mascotas peludas en el perfecto compañero.
«Nuestro trabajo muestran que los perros tienen una forma innata para procesar rostros en sus cerebros, una calidad que hasta ahora sólo ha documentado en los seres humanos y otros primates», dijo Gregory Berns, neurocientífico de la Universidad de Emory y autor principal del estudio.
Berns sugirió que esto puede ayudar a explicar la extrema sensibilidad de las mascotas hacia las señales sociales humanas ligado a las cuestiones evolutivas que rodean a al mejor y más antiguo amigo del hombre.
Dijo Daniel Dilks, profesor en psicología de la universidad: «Los perros cohabitaron con los humanos por más tiempo que cualquier otro animal. Son increíblemente sociales. Una mayor comprensión de su cognición y percepción nos puede decir más acerca de la vida en sociedad en general».
Por qué hoy se conmemora su día en Argentina
La efeméride acarrea una historia detrás. Chonino era un ovejero alemán nacido el 4 de abril de 1975. El 15 de diciembre de 1977 ingresó a la Policía Federal Argentina luego de superar las pruebas de aptitudes físicas y psíquicas requeridas.
En la madrugada del 2 de junio de 1983, dos Agentes de la Federal, recorrían la zona de Av. Gral. Paz y Lastra con sus respectivos perros, entre ellos Chonino, y comenzaron un tiroteo con dos sospechosos.
Chonino observó que su guía había caído herido, por lo que se abalanzó hacia de uno de los delincuentes y se prendió del brazo inmovilizándolo y desarmándolo. Al ver la escena, el otro delincuente le disparó al animal en el pecho. Ya sin fuerzas, Chonino se arrastró hacia su guía y murió a su lado.