Se delató el mismo. Iba ebrio, zigzagueando en la ruta y cuando lo pararon, notaron que llevaba una carga de marihuana. Ahora trascendió que lo condenaron a cuatro años de cárcel por eso.
El hombre se llama Ismael Benítez, de 52 años, y tiene domicilio en Candelaria. El día 18 de mayo de 2015, a las 22.15, personal de la comisaría de Santo Pipó recibió una llamada telefónica desde la División Comando Radioeléctrico de Jardín América UR-IX en la que avisaban que una camioneta blanca, dominio CNL 759, circulaba por la ruta nacional 12 en dirección Jardín América-Posadas efectuando maniobras peligrosas. En consecuencia, la fuerza de seguridad implementó un control vehicular en las proximidades de la avenida San Martín de Pipó, desde donde observó la aproximación del vehículo en cuestión que se desplazaba con las luces delanteras apagadas. El vehículo Hyunday se detuvo voluntariamente. Cuando se acercaron al chofer, que no era otro que Benítez, este presentaba dificultades psicomotrices y emanaba un fuerte olor etílico. Estaba totalmente borracho.
El conductor fue demorado “para recuperar su estado de cognición y resguardar tanto su integridad física como la de terceros”, indicaron las autoridades. Junto con la camioneta fue llevado a la comisaría pipeña. Allí se efectuó el acta de incautación del vehículo en presencia de testigos. Durante ese trámite se determinó que en la carrocería del rodado, entre cajas de mandioca, había una bolsa tipo arpillera con varios paquetes con marihuana. La carga pesó 9,440 Kgs, pero alcanzó para que al hombre le abrieran una causa en la Justicia Federal.
Con la contundente evidencia en su contra, Benítez optó por el juicio abreviado y se declaró culpable. El Tribunal Federal de Posadas, conformado por los magistrados Mario Hachiro Doi, Normal Lampugnani y Manuel Moreira, lo condenó a cuatro años de prisión por el delito de “transporte de estupefacientes”.
Condenan a chofer que pescaron ebrio transportando una carga de marihuana
