Familiares y amigos de Gisel Rodríguez Da Silva (26), asesinada en la casa que alquilaba en Posadas, el 20 de marzo pasado, se movilizaron el miércoles cuando se cumplió un mes del femicidio. Allí se pidió justicia para la joven y que no haya más víctimas de violencia de género.
La convocatoria fue en la plaza 9 de Julio, donde los presentes levantaron sus pancartas para concientizar acerca de una problemática que preocupa mucho a la sociedad argentina en general y a la misionera en particular.
“Callaron su voz, pero sigue viva en los corazones los que la amamos”, repitieron los movilizados.
Sobre el caso Gisel, fuentes judiciales adelantaron que es inminente la prisión preventiva para el imputado Carlos Martín Ruiz Díaz (29), quien fue detenido al día siguiente del crimen en Encarnación, Paraguay, hacia donde había escapado poco antes de que encontraran el cadáver de su ex mujer en la casa del barrio Residencial Sur de la capital provincial (esto es cerca de la plaza Estévez y la chacra 32-33).
Ante la prensa encarnacena, Ruiz Díaz admitió que mató a su ex “por problemas personales”, dijo con suma frialdad. Contó que tuvo una discusión de pareja y que asesinó a Gisel.
Para los investigadores, hay indicios de que la golpeó y luego la asfixió con las manos primero y con un cordón después.
El hombre habría lavado la escena del crimen para borrar las manchas de sangre y luego llevó a la hija que tiene con la víctima a la casa de sus suegros, para luego escapar hacia Encarnación por el puente internacional San Roque González de Santa Cruz.
Fue su propia hija, de tres años, quien le contó a los abuelos que sus papis habían tenido una discusión fuerte. Poco después se descubrió el asesinato.
Quien lleva adelante las actuaciones es el juez de Instrucción Uno, Marcelo Cardozo, quien imputó a Ruiz Díaz del delito de “homicidio agravado por la relación de pareja”, previsto en el inciso 1 del artículo 80 del Código Penal argentino, que contempla penas de reclusión o prisión perpetua “al que matare: a su ascendiente, descendiente o cónyuge, ex cónyuge o a la persona con quien mantiene o ha mantenido una relación de pareja, mediare o no convivencia”.
Fuentes judiciales confiaron que apenas restan unos trámites para que el magistrado firme la resolución de prisión preventiva.
MAS
EP
