Un quite de colaboración de los controladores de tránsito aéreo en Buenos Aires obligó a Austral a cancelar el vuelo programado para esta mañana de Aeroparque a Posadas, con regreso a la Capital Federal.
En total, fueron cuatro los vuelos de Aerolíneas Argentinas/Austral que debían partir esta mañana hacia el interior del país y que fueron cancelados en el Aeroparque metropolitano como consecuencia de una asamblea de controladores que resolvieron realizar un quite de colaboración. Cabe destacar que los controladores prestan un servicio declarado escencial y no pueden realizar paros como otros trabajadores.
Según informaron fuentes de la terminal aérea a la agencia Télam, hacia las 8.30 se encontraban cancelados vuelos con destino a las ciudades de Mar del plata, Posadas, Córdoba y Neuquén.
Desde las 7 de la mañana en el primer piso del Aeroparque Metropolitano comenzó una asamblea de los controladores aéreos, nucleados en la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), y desde entonces se produjeron las primeras demoras.
A las 9 el hall del Aeroparque metropolitano se encontraba totalmente colmado de pasajeros como consecuencia de la cancelación de esos cuatro vuelos y la demora de los restantes.
En tanto, en el aeropuerto internacional de Ezeiza la llegada de aviones era normal, pero las fuentes consultadas dijeron que a partir de las 14, cuando comienzan a partir la mayoría de los vuelos internacionales, podrían producirse demoras.
El vuelo de la tarde, por ahora sale
Para el día de hoy, el Aeropuerto General San Martín de Posadas tiene programados dos vuelos de conexión con la Capital Federal. El vuelo de la tarde, programado para arribar a Posadas a las 15.25 (parte de Aeroparque a las 13.55) por ahora está en pie. Los pasajeros, de todas formas, deberán llamar a Aerolíneas (0800-222-8652) o al aeropuerto posadeño (4457413) para confirmar la salida del vuelo.
EANA S.E.
Los controladores de tránsito aéreo atraviesan por un proceso de transición en su organización. Toda la vida dependieron de la fuerza aérea, pero en 2005 el entonces presidente Néstor Kirchner decidió que pasaran a depender de la aviación civil, y creó la ANAC, a partir del escándalo de las «narcovalijas» de Southern Winds.
En 2011, tras una protesta que paralizó vuelos, volvieron a la órbita de la Fuerza Aérea «en comisión», aunque siguieron dependiendo de la ANAC administrativamente. Como la ANAC es reguladora de la aviación civil.
La ANAC no puede prestar el servicio de tránsito aéreo y al mismo tiempo regularlo y controlarlo, porque de esa forma es juez y parte, argumentan los controladores. En los últimos años, los controladores pelearon para que se creara un ente autónomo que los contenga.
A fines del año pasado se sancionó la ley que crea EANA (Empresa Argentina de Navegación Aérea), un organismo que los aglutinará, capacitará y creará un plan de carreras para una de las profesiones más estresantes del mundo que en la Argentina vivió bajo el mando -arbitrario, dicen los controladores- de la Fuerza Aérea.
Como siempre vivieron bajo la órbita castrense, los controladores recién empezaron a organizarse gremialmente en los últimos años. Una parte de aglutinó en ATE (Asociación de Trabajadores del Estado), la otra parte se aglutinó en APTA, la Asociación del Personal Técnico Aeronáutico (APTA), conducida por Ricardo Cirielli, el dirigente gremial que ayudó a salvar a Aerolíneas Argentinas de la desaparición en la crisis de 2001 y que fue subsecretario de Transporte Aéreo con Néstor Kirchner. Cargo al que renunció tras desavenencias con el ex Secretario de Transporte, Ricardo Jaime, para volver a conducir APTA.
MB
EP
