Tras dos años sin lograr hablar con su hija, un padre comenzó una intensa búsqueda que terminó con el peor escenario: Daiana Marisol Ojeda, de 16 años, fue hallada enterrada debajo de la cama matrimonial de su madre y su padrastro, en la localidad chaqueña de Fuerte Esperanza, a 500 kilómetros de Resistencia.
Hacía 24 meses que el hombre intentaba comunicarse con la adolescente, pero las versiones de su ex mujer sobre el paradero de la menor le resultaron muy contradictorias, por lo que encaró una investigación policial.
Cuando fue al domicilio, el padrastro de la víctima le confesó que Daiana estaba embarazada y que familiares la golpearon en el vientre para que abortara. Las lesiones le habrían causado una infección que derivó en su muerte, aunque aún se investigan las causas del deceso.
El diario Norte de Resistencia informó que fue la policía la que allanó la vivienda y removió el suelo del patio, lugar señalado a las autoridades por el padrastro para despistar. Desafortunadamente, el cuerpo de la joven fue hallado debajo de la cama matrimonial de su madre y su padrastro.
(InfoBae)
