El poder adquisitivo del salario alcanzó este año sus niveles más altos desde la convertibilidad, destacó ayer el Centro de Estudios Económicos y Sociales Scalabrini Ortiz (Ceso) en el marco de un informe sobre Precios, ingresos y consumo.
El trabajo señala que el nivel general de salarios mejoró en septiembre un 29,8% en términos nominales comparado con el mismo mes del año pasado y un 4,5% en términos reales “si se consideran los ingresos deflactados por el IPC-provincias”.

El mismo proceso se dio en el plano de las jubilaciones y pensiones. En este caso, el informe señala que el haber mínimo aumentó de $ 3822 a $ 4299, lo que representa un aumento del 33% en septiembre interanual, con una recuperación de 7 puntos en el poder de compra de acuerdo al IPC-provincias.

La AUH, que subió de $ 644 a $ 837, experimentó un incremento del 30% interanual en el noveno mes, con lo que aumentó su poder adquisitivo “frente a todos los índices de inflación recomponiendo los ingresos de los sectores más vulnerables de la sociedad”, explicó el CESO, que agregó que el poder de compra de salarios y jubilaciones superan en 9 puntos el salario promedio de los años de la convertibilidad.

El titular del Ceso, Andrés Asiaín, evaluó que los datos del informe “marcan que el eje de la recuperación que vemos a nivel de consumo y de actividad económica se vincula a la mejora del salario y a la vigencia de las negociaciones paritarias”, más allá de la comparación con los 90, cuando había un desempleo superior al 20 por ciento.

En cuanto  a las jubilaciones, el economista señaló que los datos del informe, a la par del dato del poder adquisitivo, “se dan en un contexto de coberturas que rondan el 97 o 98 por ciento”. Esta realidad, analizó el especialista, “genera tensiones y disconformidad en el ámbito de las empresas que presionan por devaluaciones para llevar esos ingresos a niveles que ellas consideran normales”, consideró.

El trabajo destaca que la suba real constituye el noveno mes consecutivo para el nivel salarial general y el quinto mes consecutivo para el salario privado registrado. La mejora en el poder de compra, agrega, “impulsó el consumo, tal como reflejan los aumentos en la facturación de supermercados (1,9% en septiembre de 2015 interanual arriba de la inflación de las provincias) y centros comerciales (5,9% en septiembre de 2015 arriba de la inflación de las provincias)”.

En el noveno mes del año, el índice de ventas constantes en supermercados deflactado por el IPCnu-Indec “aumentó un 11% en relación al mismo mes de 2014″. A su vez, explicó el informe, si se tiene en cuenta el mismo indicador deflactado por la canasta de alimentos del IPC-provincias, “las ventas constantes en supermercados se incrementaron un 1,9% en el mismo período”.

La actividad de los centros comerciales, suma el trabajo del Ceso, el índice de ventas constantes medidas por el IPCnu-Indec aumentó en septiembre un 16% respecto al mismo mes del año pasado. El informe remarca que “al deflactar el mismo índice de ventas con los precios del IPC-provincias, las ventas en los centros comerciales aumentaron en septiembre de 2015 un 5,9% respecto al mismo mes del año pasado”.