Ocurrió en EE.UU. la chiquita no quiso mostrarle su perrito y el nene le disparó con la escopeta de su padre.
Una simple pelea de chicos sobre un cachorro llevó a un niño de 11 años a disparar y matar a su vecina de ocho en la localidad de White Pine, en el estado de Tennessee, en el centro de Estados Unidos.
Según explicó la madre de la víctima, Latasha Dyer, su hija estaba jugando afuera cuando su vecino y compañero de escuela le pidió que lo dejara ver al cachorro. La pequeña McKayla respondió «no» y entonces el chico agarró la escopeta calibre 12 de su padre y, desde su ventana, le disparó en el pecho. La chiquita murió poco después en el hospital.
El alguacil del condado de Jefferson, G.W. «Bud» McCoig, dijo que el niño fue acusado de asesinato en primer grado y está en un centro de detención juvenil. Según Mccoig, la escopeta se encontraba en un armario de la casa sin cerrojo.
En una entrevista con el canal local WATE 6, Latasha Dyer recordó a su hija como «una niña preciosa que siempre era capaz de arrancarte una sonrisa sin importar el estado de ánimo en que te encontrases».
Además, aseguró que el chico acosaba a su hija.»Se burlaba de ella, le decía apodos, era malo con ella», contó. Después de que hablará con la escuela, el chico abandonó el acoso por un tiempo «y luego, de golpe, ayer le disparó».
