Este martes se reanudó el debate en el tribunal Federal de Posadas por el hecho ocurrido en 2012 en Puerto Rico, cuando de una comisaría sacaron casi una tonelada de marihuana guardada de un operativo con fines de comercializarlos. Declaró el jefe de Unidad Regional en aquel entonces, Aníbal Bernal, quien negó que el haya pedido un procedimiento especial con esos estupefacientes a Miguel Dionisio Rojas, ex oficial, a quien detuvieron con varios kilos en su vehículo particular en Puerto Leoni.
El primero en declarar por la mañana ante los jueces Norma Lampugnani, Manuel Jesús Moreira y Mario Hachiro Doi, fue el comisario General Aníbal Bernal, a quien el primer día, uno de los siete imputados, Miguel Rojas, señaló como el que le pidió que haga un procedimiento secreto para desbaratar una banda de traficantes dentro de la Prefectura Naval.
El uniformado, que en septiembre de 2012 cuando saltó el faltando de marihuana que se guardaba en la seccional Primera de Puerto Rico (900 kilos), era jefe de la Unidad Regional 4 de esa localidad. Negó que diera esas directivas y que no recuerda entrevistarse de manera particular con el mencionado Rojas.
Además explicó que luego de ese procedimiento en donde se secuestró más de cuatro toneladas de marihuana, el jefe de la Primera le pidió reforzar la seguridad de la sala de armas, en donde fue acondicionada la droga.
Bernal había sido apuntado por Miguel Rojas en el primer día de debate cuando declaró. Dijo que ese comisario le había prometido ser el jefe de la brigada de Investigaciones y se sometía a realizar un procedimiento secreto para desarticular a gente de Prefectura que se dedicaba al narcotráfico.
Bernal negó todo eso y además dijo desconocer cual era el tratamiento o el cuidado en particular que se le daba a la droga guardada en la comisaría pero que entendía que era responsabilidad de los que estaban de guardia y naturalmente del jefe de la dependencia, en este caso el comisario Esquivel. Que también está imputado pero por incumplimiento de funcionario público y no del delito en sí.
Por otra parte aseguró que un jefe de unidad no puede disponer de un ascenso o traslado más que una recomendación o pedido pro una vacante, pero en donde terminan resolviendo esas cuestiones es en Jefatura de Policía a través del departamento de Personal.
También dijo que el 3 de septiembre cuando detuvieron a Rojas con marihuana en su auto particular, fue hasta Prefectura a confirmar que se trataba de un funcionario policial pero que en esa otra fuerza no le dieron detalles del procedimiento pero sí que vio droga en una de las oficinas.
Otros que declararon ante los magistrados fueron los prefecturianos Juan Moreira y Diego Samudio. Ambos participaron del procedimiento donde detuvieron a Rojas y ratificaron que el uniformado cuando fue detenido en el acceso a un yerbal en Puerto Leoni había manifestado ser policía y que llevaba en su auto una cantidad importante de marihuana. La droga ya estaba enumerada por lo que se presume que era de un procedimiento anterior, dijeron los actuales integrantes de PNA.
Ambos coincidieron que al momento de llegar hasta donde estaba el auto de Rojas, dos o tres personas escaparon del lugar. Cabe recordar que en su momento, cuando se leyó la declaración de Diego Rojas, otro imputado y el único que no era policía y era el que consiguió comprador para la droga, reconoció que se escapó del lugar.
Por otra parte comparecieron José Ruiz Díaz y Ricardo Sehnem, dos testigos que la Prefectura buscó para el procedimiento de la detención de Rojas y el conteo de la marihuana. Reconocieron y describieron el auto blanco del ex uniformado y aseguraron que había estupefacientes en el hecho. No vieron donde guardaron la droga pero que fue en el edificio de Prefectura en Puerto Rico.
Los jueces y por común acuerdo entre las otras partes,, informaron que se desistieron de cuatro testigos que estaban previstos para mañana como el propio jefe de Policía Jorge Munaretto y el subsecretario de Seguridad Julio Lenzken además de dos prefecturianos como José Ojeda e Hilario Cruz. Sí los magistrados admitieron nuevos testimonios de Luis Salazar, jefe de la brigada de Investigaciones de Puerto Rico en 2012, Julio Ríos y Angélica Cabral, la mujer de Sergio Benítez, uno de los imputados, que declaró en su momento que el día de la detención de Rojas había estado llevando a su pareja al médico de urgencia porque tenía un problema con el embarazo. Esa versión ratificó la doctora Helga Zulamita Ledesma en uno de los primeros días de debate aunque sin recordar fecha exacta.
El debate continuará el miércoles con los nuevos testigos y con la lectura de la declaración en su momento de testigos que han fallecido. Una vez concluida esa jornada, se fijará el día para la exposición de los alegatos y posteriormente sentencia.
Los imputados en este hecho ocurrido en septiembre de 2012 son: Miguel Dionisio Rojas, Diego Rojas (el único no policía), Oscar Merlos, Sergio Benítez, Pedro Betancur, Milciades Benítez y Sergio Esquivel, estos dos últimos eran los jefes de la Primera y su acusación es por incumplimiento de funcionarios públicos. El resto acusados de robar la mercadería o participar del hecho con fines de narcotráfico.
