Fue en la tarde de ayer tras la denuncia de Carolina L. (27), quien dio aviso a la policía que en su vivienda del barrio Oleros de Posadas desconocidos le habrían sustraído un colchón, dos sillas, y prendas de vestir. Todo estaba en la casa de un tatuador que recibió los elementos como parte de pago de un cliente.
Los efectivos llegaron tras las investigaciones efectuadas, hasta una vivienda del barrio Oleros, donde un hombre identificado como Blas G. (31), indicó que tanto el colchón como las dos sillas le habrían sido entregados por un joven como parte de pago de un tatuaje que este le había realizado.
La policía procedió al secuestro de los elementos denunciados como sustraídos, los que previas tareas administrativas serían restituidos a su propietaria. Mientras tanto buscan dar con el responsable del robo.
