Más de 200 personas ya han recibido sus certificados en los últimos 5 años a través del sistema cubano de lectoescritura “Yo, si puedo” que se viene implementando con éxito en los barrios más vulnerables de la Capital del Trabajo.
Algunos de los barrios de Eldorado donde se ha trabajado con el sistema cubano de lectoescritura “Yo, si puedo” son: Sarmiento, Loteo Krause, Parque Schwelm, Roulet, Santa Rosa de Lima, Puerto Los Pinares, Yerbal, Gardes, San Cayetano, 20 de Junio, La Colina, Oleaginosa, Antiguo Centro y Schick, entre otros.
Y para este año, la dirección de Cultura y Turismo de Eldorado, comenzó a diagramar los trabajos semanales para seguir llevando a los distintos barrios de la ciudad el sistema cubano de lectoescritura “Yo, si puedo” que con rotundo éxito se viene desarrollando en diferentes barrios de la ciudad.
La tarea de acompañamiento esta a cargo de personal dependiente del Departamento de Cultura, quienes se encargan de hacer relevamientos barriales para detectar personas mayores que no sepan leer ni escribir.
En este sentido, el delegado cubano Ramón Rodríguez recorrió algunos lugares, haciendo un reconocimiento de campo.
Este programa de estudios que hace seis años funciona en Eldorado destinado a persona de 16 años en adelante que no tuvieron posibilidad de estudio, consiste en un convenio entre la República de Cuba y nuestro País y permite a los que se suman al mismo la finalización de los estudios primarios, de una manera rápida y efectiva.
Consiste en el uso de un cuadernillo con las explicaciones necesarias, y los niveles de estudios grabados en DVD, que constan de sesenta y cinco (65) clases, es por ello que se utiliza un televisor y un reproductor de DVD, como así una persona encargada del barrio que tiene estudios terminados como ayudantes de asesoría. En tres meses la persona aprende a escribir y a leer con este método de Yo, Si Puedo, y si la dedicación es mayor hasta en dos meses se logra la finalidad de estudio.
Cabe mencionar que las personas alfabetizadas a través de este Programa se mostraron muy contentas de aprender a escribir y leer, de esta manera pueden defenderse de situaciones en lo cotidiano, como por ejemplo “leer los carteles que indican el destino de los colectivos urbanos, “recibir y contestar mensajes en los celulares”, “leer el tickets de compras” y otros.
