Con una peña en la que participaron artistas de toda la provincia, la ciudad de Posadas festejo por los 400 años de la instalación de la reducción jesuítica Nuestra Señora de la Anunciación de Itapúa. Desde temprano los vecinos fueron copando la calle para escuchar a Joselo Schuap, Rulo Gravovieski, Pato García, Los Peregrinos, Selva María y muchos otros difusores de la música, que recordaron el valor histórico de la Bajada Vieja.
Entre recuerdos, emociones y alegría los vecinos a la vez pidieron por la preservación del barrio como sitio de interés histórico para la provincia.
Pasadas las 20, los pobladores del vecindario fueron copando la calle frente al negocio de doña Pomposa, esa tradicional esquina que marca el antiguo centro de la ciudad.
Entre recuerdos y menciones de las familias históricas del barrio, los presentadores fueron dando lugar a los artistas con que se engalanaba la fiesta, que, como debe ser, fue totalmente popular y no faltó el choripán, los mates, las chipas y otras comidas típicas.
Abrió la noche Selva María con canciones que hablaban del río y las memorias, luego subieron al escenario Jael López y cantares de mi Tierra. Luego se sumo el poeta Miguel “El torito” Méndez que recitando fue trajinando la historia de su infancia en las callecitas de Posadas.
Luego subieron al escenario “Los Peregrinos” de Oberá y María Belén Ruppel de Aristóbulo del Valle. Quedaba claro que para este festejo se sumaron artistas de toda la provincia. Luego llegaron los Figas, Joselo Schuap, Rulo Gravovieski, Enzo Lautaro, Los Encina, el Pato García y Amanda de Colombia. El ballet de Mundo Tango y los Tambores Vape (los hijos de Espiral Samba Show) dieron el toque distinto a una noche que quería ser eterna.
Entre los vecinos homenajeados en la noche estuvieron Doña Pomposa, impulsora del evento, y el recordado basquetbolista Ernesto “Finito” Gehrmann, quien fue presentado como el mejor deportista que dio Misiones a la fecha, un grande que su humildad lo hace gigante.
