A continuación, el análisis del desempeño de cada jugador de Crucero del Norte en el partido de anoche ante Tigre, en el cual empató 0 a 0.
Germán Caffa: Otra vez, fue uno de los puntos altos del equipo. Le sacó el gol del triunfo a González Pires, cuando a los 16 del ST un pelotazo cruzado dejó al ex defensor de River mano a mano con el entrerriano. «Tito» salió a atorar rápido al defensor y mandó al córner el tiro del jugador de Tigre. Descolgó varios centros y pelotas al área y salió jugando siempre con sus laterales, por abajo.
Alejandro Pérez: No generó tanto peligro en ataque, ya que estuvo más preocupado porque no se le metieran por sus espaldas. En uno de esos intentos, Tigre casi deja mano a mano a un delantero, pero Tarrito llegó con la puntita del botín al cierre providencial.
Federico Rosso: Estuvo sólido en defensa y no permitió que los delanteros de Tigre entraran al área con pelota dominada. Protagonizó una jugada espectacular, al recharzar de rabona ante la presión de un delantero de Tigre, al mejor estilo Marcos Rojo en el Mundial, en el partido en el Maracaná.
Gabriel Tomassini: También realizó una buena labor defensiva, y contuvo bien los intentos de delanteros como Luna o Larrondo.
Nicolás Dematei: Se proyectó varias veces en ataque y aunque no siempre terminó bien la jugada, se transformó en una alternativa para llevar peligro al arco de Javiero García. En la marca anduvo bien.
Marcelo Lamas: jugó en muy buen nivel, fue una de las figuras de Crucero. Se paró apenas adelante de los marcadores centrales y sacó todo. Tiró un pelotazo al área que Avalos transformó en la jugada del penal.
Fabián Vázquez: la figura de Crucero y de la cancha. Combinó su elegancia para jugar con su despliegue. Al contar con el «Chelo» Lamas de tapón, pudo soltarse y dedicarse a crear juego en ofensiva. Coronó su gran primer tiempo con una muy buena definición ante el pase de Avalos, pero el palo dijo «no». En el segundo tiempo, decayó su nivel y terminó reemplazado. Pero Crucero confirmó que Vázquez puede ser importante en este equipo de Primera. Con el rendimiento de ayer, le confirmó a Schurrer que está por encima del «Negro» Olmedo.
Dardo Romero: el jugador completó ayer el récord de haber jugado en todas las categorías: Liga Posadeña, Argentino C, B y A, Nacional B y Primera. Tuvo un primer tiempo errático, donde no hizo pie en el juego. Pero en el segundo tiempo, quizás ante la baja en el nivel de Vázquez, se hizo cargo de los hilos del Colectivero y puso un par de pelotazos con su sello. Además, realizó un gran despliegue y no pareció sentir el cansancio en la segunda etapa.
Gabriel Chironi: jugó casi como un nueve retrasado, bien adelantado y apenas por detrás de la línea de Gabriel Avalos y Diego Torres. Su función fue la de dar el último pase a los delanteros o llegar el mismo a posiciones de remate. A veces lo cumplió, pero como todo el equipo, le faltó «terminación» de la jugada.
Diego Torres: cada vez que la toca, cada vez que encara, parece que va a pasar algo. Su velocidad para encarar a los defensores se ve deteriorada por el campo de juego y la altura del césped. No pateó mal el penal, pero siempre se recordará que erró la gran posibilidad de quedarse con los tres puntos. En el segundo tiempo, su salida estaba cantada.
Gabriel Avalos: No tuvo un buen partido, lució desconectado del ataque. Pero la realidad es que protagonizó las dos jugadas más importantes del encuentro y en ambas, Crucero tuvo el triunfo. En la primera, bajó perfecto de pecho un centro que venía muy alto, en el mismo movimiento giró, la bajó de pecho y se acomodó para fusilar a Javi García, a quien no le quedó otra que bajarlo (¿debió expulsarlo Pompei?). En la otra, recibió de Chironi sobre la izquierda, encaró a dos defensores y cómo vio que no podía pasar, esperó y la soltó perfecta para la entrada de Vázquez de frente. Fabián le entró también muy bien y el palo «maldito», el mismo que rozó el tiro penal de Torres minutos antes, dijo una vez más «no». Es titular indiscutido en el ataque Colectivero.
Nicolás Olmedo: Entró por Fabián Vázquez y buscó recuperar la presencia en el centro del campo de juego. Por ahora, el ex Argentinos Juniors está por encima del «Negro» y parece el dueño del puesto.
Ernesto «Pinti» Alvarez: la gente coreó su nombre al ratito de comenzar el segundo tiempo. Y «Pinti» saltó a la cancha y demostró el hambre y las ganas de hacer cosas importantes que tiene. Ganó un par de pelotas de cabeza. En una contra se sacó dos rivales de encima pero no pudo con el tercero. Sacó dos remates a las manos de Javi García, el segundo con cierto peligro. Y tuvo el gol del triunfo cuando a los 90 conectó defectuosamente una pelota bajada en el área. Hubiera sido la noche soñada si la conectaba bien. Se las ingenió para generarse él mismo sus jugadas de peligro. Tambien protagonizó una buena combinación con Gabriel Avalos, tiró una pared en la que Avalos se la devolvió de tacó y de espaldas. «Nos hablamos en Guaraní, para que los defensores no nos entiendan», tiró después del partido. Si no es titular, será un cambio obligado en todos los partidos.
Julio Barraza: ingresó por Rosso y cumplió una sobria labor en defensa. Pero al igual que el «Negro» Olmedo con Vázquez, hoy parece detrás en la consideración de Schurrer. Fue importante para cuidar el cero en el arco propio cuando, en los últimos 15 minutos, Tigre se jugó sus últimas bolas, aprovechando cierto descuido del Colectivero -que buscaba ganarlo- en defensa.
MB
EP
