Numerosas universidades, centros de investigación, empresas y organismos estatales alrededor del mundo se han esforzado por determinar quiénes conducen mejor, si los hombres o las mujeres.
Lo que los estudios descubran y pretendan sostener seguirá formando parte de la cultura de enfrentamiento entre hombres y mujeres que nada resuelve, y de la que no resulta nada útil.
Un estudio realizado por el Centro de Experimentación de Seguridad Vial, en Argentina, sostiene que las mujeres manejan mejor que los hombres.
El principal motivo sería que las mujeres son más prudentes, y los hombres más agresivos. A pesar de obtener tan sólo entre un 25% y un 30% de las licencias de conducir en Argentina durante el 2012, las mujeres han protagonizado una menor proporción de los accidentes automovilísticos y además, han sido los de menor gravedad.
Según el estudio realizado por CITRÖEN y el CESVI las mujeres utilizan el cinturón de seguridad más que los hombres, además de ser más prudentes, pacientes y mantener mayor distancia de los demás vehículos. También se analizó el uso de teléfonos celulares durante el manejo y las mujeres también salieron mejor posicionadas que los hombres.
De los accidentes graves en ruta, las mujeres protagonizan menos de un 5%. Pero dado que de hecho hay menos mujeres conduciendo, se normalizaron los datos, resultando que las mujeres en relación a los hombres estarían protagonizando cerca de un 30% de éstos accidentes.
Otros estudios estadísticos demuestran todo lo contrario. Las mujeres serían más ansiosas e imprudentes y protagonizarían una mayor proporción de los accidentes graves. También serían menos capaces de leer los mapas, lo cual estaría relacionado con la menor cantidad de testosterona en sangre.
Un estudio de la Universidad de Michigan determinó que las mujeres protagonizaron una mayor proporción de los accidentes ocurridos en ruta, a pesar de haber recorrido menos kilómetros.
Asimismo, pudo constarse que las mujeres chocan más entre ellas mismas que los hombres entre ellos. Este estudio sostiene que las mujeres serían menos capaces de resolver situaciones inesperadas en el tránsito.
