Timoteo Llera está llegando al final de su primer mandato como titular de la Liga Posadeña y quiere quedarse «para completar todos los desafíos que encaramos», dice, sentado en la remozada sala de reuniones del histórico edificio de la calle Catamarca. El 29 de diciembre próximo los clubes afiliados a la Liga deberán elegir si Timoteo Llera se queda por dos años más o emerge un nuevo titular, entre ellos, Luis Valdovinos, que quiere volver al sillón que ocupó durante 10 años.
«Acá durante 70 años no se cambió un picaporte, y ahora está todo a nuevo, la semana que viene empezamos con el frente, va a estar a nuevo», dice Llera.
El médico y ex intendente de Iguazú le dio a su gestión un perfil más político y desde el rol de titular de la Liga logró distintos apoyos del gobierno provincial. Por ejemplo, firmó un convenio con el Ministerio de Salud, que le proveyó a los partidos programados por la Liga de médicos del área de traumatología. Por reglamento, un partido de la Liga no puede jugarse sin médico y sin custodia policial. «No es así en todas las provincias pero acá sí, un día me llamaron y salí de un partido de Crucero que estaba viendo, porque no había médico, y me quedé yo hasta que vino el médico designado», contó Llera a modo de anécdota, pero revelando que la programación de partidos en estos tiempos no estuvo excenta de dificultades.
«A pesar de todas las dificultades que hemos tenido yo creo que hemos cumplido algunos objetivos, la prioridad era arreglar nuestra casa, que es la sede de la entidad madre del fútbol posadeño. Esto era un desastre, entrar a la Liga era imposible, parecía un baño por el olor que había, durante 70 y pico de años no se cambio un picaporte o una llave y en un año y medio remodelamos todo, la semana que viene se arranca con el frente, va a ser nuevo», explicó el cirujano, quien trabaja durante la mañana en el EPRAC y remarca que encaró su trabajo por «amor al fútbol».
«En primer lugar yo no vivo de la Liga, no vivo del fútbol, este señor (por Valdovinos) que quiere postularse sí, este es un aporte que hago porque me gusta el fútbol, me permitió ser profesional (médico), porque jugaba al fútbol para poder comer», dice Llera, recordando cuando estudiaba medicina en Corrientes y jugaba para Tucumán, un equipo de la B de esa ciudad, que le permitía ganarse unos pesos.
«Ese (la remodelación de la sede) era uno de los objetivos primordiales, después organizar los campeonatos, de Primera, la B, la C y los infantiles. Hubieron dos, el Apertura y el Clasuura, con algunas dificultades, faltaban los médicos o no teníamos los policías, la misión del CD de la liga es programar los partidos, designar los campos de juego, quiero expresar mi agradecimiento al Gobierno de la provincia a través del Ministerio de Salud, al Presidente de la Cámara de Diputados, Ingeniero Rovira, y en especial al Ministro de Salud, doctor Herrera Ahuad que nos facilitó los médicos del servicio de traumatología, que es un aporte del Gobierno a la Liga de forma gratuita», explicó.
«Todos los clubes han recibido un aporte de la provincia, aparte del famoso subsidio de 200.000 pesos que permitió saldar deuda de muchos clubes con la Liga», dice Llera, dejando en claro que su perfil político permitió golpear y abrir puertas que ayudaron a mejorar la situación de los clubes posadeños.
Balances y gastos que no se rindieron
«Hoy tenemos un superávit de 319.000 pesos, pero cuando me hice cargo de la Liga había un balance no aprobado, documentación que nunca se rindió , un subsidio de la Dirección General de Rentas de 50.000 pesos sin rendir, de la gestión anterior, es un balance aprobado por algunos y desaprobado por otros, hay facturas de un comedor de Mitre de 11.000 pesos por un club que presuntamente vino a jugar acá, se hizo la auditoria y es inexistente, compra de equipos por 12.000 pesos, sobrefacturados, hay un montón de irregularidades», disparó Llera con una planilla de exel en la mano.
