Dios quiere que sus hijos tengan prosperidad, pero hay algunas cosas que debemos conocer de la Palabra de Dios, para no caer en la maldición económica. Veamos lo que nos dice la Biblia al respecto.
Hay puertas que no debemos abrir, para que no entre en nuestras vidas la maldición económica. Veamos algunas de esas puertas:
I) AVARICIA.
Deseo desmedido por hacer riqueza o acumular bienes materiales …
1° Corintios 6:10 …ni los ladrones, ni los avaros… heredarán el reino de Dios.
Es tan terrible este pecado que le puede negar la salvación a la persona, pues el dinero se convierte en un ídolo, en un dios y entonces la Avaricia es idolatría.
Lucas 12:16 También les refirió una parábola, diciendo: La heredad de un hombre rico había producido mucho.
Lucas 12:17 Y él pensaba dentro de sí, diciendo: ¿Qué haré, porque no tengo dónde guardar mis frutos?
Lucas 12:18 Y dijo: Esto haré: derribaré mis graneros, y los edificaré mayores, y allí guardaré todos mis frutos y mis bienes;
Lucas 12:19 y diré a mi alma: Alma, muchos bienes tienes guardados para muchos años; repósate, come, bebe, regocíjate.
Lucas 12:20 Pero Dios le dijo: Necio, esta noche vienen a pedir tu alma; y lo que has provisto, ¿de quién será?
Lucas 12:21 Así es el que hace para sí tesoro, y no es rico para con Dios.
El antídoto para la avaricia es ser rico para con Dios, y para con el prójimo y el necesitado. Practiquemos la generosidad y nunca vamos a caer en esta maldición.
II) ADQUIRIR DEUDAS
Una cosa es tener compromiso y otra cosa es SER DEUDOR. Tenga cuidado porque algunas ofertas bancarias, son solo para endeudarlo. La acumulación compulsiva de cosas puede ser también una atadura espiritual, y tiene que recibir liberación.
Salmos 37:21 El impío toma prestado, y no paga; Mas el justo tiene misericordia, y dá.
Hay tres clases de personas en la Biblia: pecadores, impíos, y justos. Los pecadores son aquellos que no les importa la Palabra de Dios y pecan sin remordimiento, los impíos son los que teniendo conciencia de la Palabra se han apartado del amor de Dios, y los justos son los que están en comunión permanente con Dios.
Romanos 13:7 Pagad a todos lo que debéis: al que tributo, tributo; al que impuesto, impuesto; al que respeto, respeto; al que honra, honra.
Dígale no a las deudas, pague a todos lo que debe y se librará de maldiciones económicas.
III) EXPLOTACIÓN ECONÓMICA
Santiago 5:4 He aquí, clama el jornal de los obreros que han cosechado vuestras tierras, el cual por engaño no les ha sido pagado por vosotros; y los clamores de los que habían segado han entrado en los oídos del Señor de los ejércitos.
Yo declaro que Usted llegará a ser un empresario, pero no se puede prosperar a costa del dinero que le pertenece a los otros. Por eso Dios le aconseja en su Palabra pagar lo justo, pagar bien el salario a quienes trabajan para Usted. No se puede retener el dinero de los obreros, pues esto dice que es una injusticia que llega al cielo!! Llega a los oídos del juez justo!! Los empresarios de Dios deben ser cuidadosos en este sentido. Si no trabaja bien hay que despedirlo, pero pagando hasta el último centavo de lo que corresponde.
VI) FRAUDE.
El fraude es una acción en contra de la rectitud y a verdad. Es vender algo que está mal, presentándolo como bueno.
Salmos 101:7 No habitará dentro de mi casa el que hace fraude; El que habla mentiras no se afirmará delante de mis ojos.
Zaqueo, el cobrador de impuestos, se arrepintió y vea lo que pasó…
Lucas 19:8 Entonces Zaqueo, puesto en pie, dijo al Señor: He aquí, Señor, la mitad de mis bienes doy a los pobres; y si en algo he defraudado a alguno, se lo devuelvo cuadruplicado.
Lucas 19:9 Jesús le dijo: Hoy ha venido la salvación a esta casa; por cuanto él también es hijo de Abraham.
Después del arrepentimiento vino la salvación. El arrepentimiento desata la bendición de Dios!!
Salmos 112:1-3 «Bienaventurado el hombre que teme a Jehová, y en sus mandamientos se deleita en gran manera. Su descendencia será poderosa en la tierra; La generación de los rectos será bendita. BIENES Y RIQUEZAS HAY EN SU CASA, y su justicia permanece para siempre».
Dios te bendiga y te de sabiduría para obrar de la manera correcta y recibir bendición económica.
Pastor Guillermo Decena, Centro Familiar Cristiano Eldorado.
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