La joven directora posadeña, Belén Bianco, presentó esta noche su ópera prima, «No hay tierra sin mal», que fue muy bien recibida por el público, que colmó la carpa 1 del predio de la Prefectura donde se realiza el primer Festival de Cine de las Tres Fronteras.
Antes de la proyección, Bianco se paró frente al público junto a la protagonista, la también misionera Ana Kallsten, quien interpreta a «Anita», una joven que atraviesa un despertar sexual algo más tardío que el de sus amigas. «Estar acá, poder presentar la película es un gran logro», destacó Kallsten, acompañada por su bebé.
«No hay tierra sin mal» es la más «misionera» de las películas que se exhiben en el festival, porque se rodó en Posadas, con actores misioneros y por una directora de la provincia. La otra protagonista es Silvia Nudelman, actriz de la Murga de la Estación.
La película arranca con una escena en la Costanera, arriba del auto, donde muestra a una Ana incómoda ante los avances de su novio. Ana no es una chica como el resto de sus amigas, que alardean sobre sus numerosas conquistas amorosas antes de ir al «boliche». Además, espía a Silvia, su empleada doméstica-amiga, quien cree -con razón- que el hombre que la conquistó tiene compromisos no declarados.
Belén Bianco sorprende. Tiene sólo 24 años, que incluso parecen menos. Y ya filmó una película que presentó en este primer Festival de Cine de las Tres Fronteras. La película se filmó integramente en la capital provincial y compite por el premio a mejor largometraje de ficción. Además, el mérito de Bianco es que logró completar su película sin apoyos de ningún instituto de fomento, como el INCAA. «No hay tierra sin mal» es una película casi íntegramente autofinanciada, una verdadera proeza.
Bianco, que estudió en la Universidad del Cine -en Buenos Aires-, mostró casi por primera vez su película. Hoy llegaron de Posadas sus padres, Hilda «Gringa» Mayer y Ricardo Bianco, quienes también participaron de la producción. Ricardo actuó de padre de Ana en un par de escenas, e Hilda hizo de cocinera durante las dos etapas de rodaje (en 2011 y 2012). Visiblemente emocionados, los dos, charlaron con Misiones Online sobre sus sensaciones. «Es un orgullo, lo hizo todo a pulmón y encima eligió el camino más dificil al filmar en 16mm, en lugar de hacerlo en digital», destacaron.
Producción «casera»
«Junté ahorros, mamá nos cocinaba, cuando filmamos en Posadas (en 2011) ibamos a comer a un restaurante de la calle Bolívar pero a la hora de la cena no tenía dinero, entonces mamá nos hacía la comida», relató Belén, sobre la producción de su película. El padre, Ricardo, también colaboró en los mil detalles que hay que atender cuando arranca un rodaje, la etapa crítica de el largo periplo que debe atravesar una obra para transformarse en película. Después, Belén si recibió algunos apoyos de sponsors de la provincia, en especial del IPLYC.
«Estoy muy nerviosa, ¿y si a la gente no le gusta?», contó ayer a la tarde, risueña, Bianco, una jovensisima directora, seguramente la más chica de todos los directores jóvenes que pululan por este Festival de las Tres Fronteras, que comenzó a trabajar en «No hay tierra…» a los 20 años. Al final de la proyección, la prueba estuvo superada.
El trabajo de Bianco compite en la categoría principal del festival: largometraje de ficción, con otras 12 piezas. Después está la categoría largometraje documental, con 10 piezas; corto regional, con 4 obras; y por último, corto internacional, con 11 obras. Los premios se entregarán el próximo sábado, en una gran ceremonia de premiación y cierre que contará con las máximas autoridades.
Otras obras de misioneros no están en la competencia oficial, como la película «Niña perro» de Veronica Gentile; o el documental de Dacher sobre Horacio Quiroga; si lo está el documental de Lucho Bernal sobre la Masacre de Oberá (Quieta non movere), en la categoría corto regional.
Otra pieza de gran contenido misionero, es el documental del correntino Camilo Gómez Montero «Buscando al Comandante Andresito», que está fuera de competencia en la categoría de exhibición «Tres Miradas». Gómez Montero indaga en la pregunta que se hace más de uno, sobre todo a partir de la revalorización de la figura del ahijado de José Gervasio de Artigas. ¿Quién fue Andrés Guacurarí? El documental se exhibirá mañana a las 22 en el Iturem.
El jueves a las 20, en tanto, Ana Zanotti, realizadora radicada en Misiones desde hace casi cuatro décadas, presentará a a las 20 «Mixtura de Vida», sobre la vida cotidiana en las ciudades y pueblos de frontera. «Arrancamos filmando en El Soberbio y fuimos bajando por la costa del Uruguay», contó hoy a MOL, Zanotti, quien también integra el jurado en el segmento de cortometrajes.
Zanotti, además, integra una agrupación de casi 80 realizadores misioneros (directores, productores, profesionales de las artes audiovisuales) que realizarán también una charla el viernes donde se referirán a la recientemente sancionada ley que crea el instituto de fomento al cine y las producciones audiovisuales en Misiones. «Trabajamos mucho en el grupo por esa ley», contó Zanotti.
El sábado viene el gobernador
«Hoy no puedo ir, pero el sábado estaré para la premiación», dijo hoy a Misiones Online el gobernador, Maurice Closs tras presentar, junto al Ministro de Turismo, Enrique Meyer, el plan de marketing turístico nacional para el 2015. Sería una noche realmente completa si ese sábado, junto a las celebridades, directores y público, el propio Closs le termina entregando el premio a la mejor película a esta novel directora misionera.
Programa para hoy
En tanto, este martes arrancó el tercer día de proyecciones del Festival de Cine de las Tres Fronteras que se realiza en Puerto Iguazú tendrá como uno de los platos fuertes la experiencia de dos mujeres que se largaron a recorrer durante dos años y medio a pueblos de la Argentina y países de la región llevando a estos lugares la proyección de películas independientes.
La cordobesa Viviana García y la salteña Griselda Moreno estarán presentando el documental sobre su gira y dando una charla en el ITUREM (ente de turismo de Iguazú) desde las 20.
Otro de los platos fuertes de esta tercera jornada de películas será, sin dudas, la película «La Salada» del argentino hijo de coreanos, Juan Martín Hsu, que también compite en «Largometraje de ficción» y cuenta cinco historias de nuevos inmigrantes de la Argentina que confluyen en el gran mercado del Gran Buenos Aires pegado al contaminado Riachuelo.
Esta tercera jornada no contará con la presencia de obras de directores misioneros, ya que se postergó a último momento el documental de Marcelo Dacher, «Horacio Quiroga, el desterrado». El inconveniente es que aún no arribó a la ciudad el realizador, que trae la cinta, pero es posible que finalmente se pase mañana, ante la gran expectativa del público.
