“Alejandro no era una persona violenta. Es más, cuando sus amigos se peleaban, él siempre era el que trataba de calmar los ánimos. Por eso no creemos que haya iniciado el hecho que terminó con esta desgracia”. La que habla es Yanina, la hermana de “Ale” Acosta (24), el joven al que ultimaron de 17 puñaladas el viernes pasado, en continuación La Rioja y avenida Corrientes.
La chica de 21 años cree que la víctima “ligó de arriba” el ataque. Sostiene que quien generó la discusión con Guillermo Barboza (23), sindicado como el autor del homicidio, fue en realidad del amigo de Alejandro que presenció el hecho: Esteban Alonso, de 18 años.
“Era Esteban quien había tenido problemas con esa personas por una chica. Mi hermano no era amigo del que lo mató. No era parte de sus amistades frecuentes. Es más, Ale ni siquiera quería salir esa noche, pero Esteban le insistió un montón. Fue tres veces a su casa para buscarlo. Hasta lo obligó a pedir prestado plata para que pudieran salir ese día”, detalla Yanina.
La joven quiere que todos estos detalles los cuente Alonso ante la Justicia. Insistió con esto, porque hasta el momento cree que ese “testigo clave” no ha contado hasta el momento todos los detalles de lo que sucedió.
“Lo que cree mi familia es que Esteban fue quien inició la discusión con este muchacho. Y que a sabiendas de que eso podía pasar, invitó a Alejandro a que lo acompañara ese día. Tampoco nos cierra que a él no le haya pasado casi nada y que no haya intercedido para defender al que dice qué era su amigo. Sospechamos que salió a correr y dejó a mi hermano en banda”. La chica añadió que a Alonso se lo dejó de ver por el barrio donde residen los Acosta, la chacra 246.
Cristian Casay, pareja de Yanina, también habló. Sostuvo que Ale era un trabajador. “Conmigo trabajó en la construcción hasta poco antes de que lo mataran. Era muy guapo y cumplidor. Incluso como lo querían blanquear, le pidieron que hiciera su DNI”, detalló.
“Alejandro siempre ayudaba a los demás. Con Esteban era muy amigo y hasta trabajaba con él, haciendo changas. Por eso nos llama la atención, que este muchacho ni siquiera apareciera en el velorio”, agregó.
Yanina apunta: “Cuando yo lo vi en la comisaría Segunda, no me pudo acercar a él. Sí lo escuché decir ‘yo no tengo la culpa, yo no tengo la culpa’.
Alejandro estaba por ser papá. Pero ya no estaba en pareja. “Justo ese jueves volvió a insistirle a la ex novia que volviera con él, pero ella no quiso”, contaron sus parientes en una charla exclusiva con Misiones Online.
Acosta era el segundo de cinco hermanos, cuatro varones y Yanina. Hace un mes, una falla cardíaca le había costado la vida a su padre, por lo que él se había transformado en el sostén de la casa. Él mantenía con sus ingresos a su madre y a sus hermanos más chicos, de 14 y 17 años, respectivamente.
En el barrio hay mucho dolor e impotencia por la inesperada partida del joven. Analizan marchar para reclamar que el caso no quede impune. Aunque para encarar cualquier movilización esperarán la marcha de la causa en el juzgado de Instrucción Tres. Hasta ahora están conformes con lo actuado por el magistrado Fernando Verón.
Ale Acosta fue asesinado de 17 puñaladas el viernes pasado. Está preso como presunto autor Guillermo Barboza (23) y como partícipe Héctor Ramón De Olivera (30).
Además de Alonso, hay otro testigo que vio cómo se registró el ataque letal: un empleado judicial que pasaba circunstancialmente por allí.
