Técnicos de Vialidad de la Provincia finalizaron un relevamiento completo a través del cual detectaron cuantiosos daños en la red caminera de todos los municipios que fueron afectados por la crecida del rio Uruguay. Además de las tareas de restauración de caminos de tierra y reparación de puentes, se deberán volver a instalar más de mil metros de alcantarillas que fueron destruidas. Se gestiona asistencia por dos millones de pesos para financiar dichas las tareas.
Un pormenorizado relevamiento realizado por técnicos de la Dirección Provincial de Vialidad (DPV) en la zona afectada por la creciente del rio Uruguay, identificó daños considerables en más de 1.100 kilómetros de caminos vecinales de tierra, en 142 metros de puentes de madera y en más de mil metros de alcantarillas. La tarea de detección de daños abarcó a todos los municipios del oriente provincial, desde Andresito, al norte; hasta Azara, en la frontera con Corrientes.
Desde el organismo señalaron que los costos que demanden los trabajos necesarios para reparar todos los daños, serán incluidos en el presupuesto fijado en la declaración de emergencia establecido por el Poder Ejecutivo Provincial, cuyo financiamiento será absorbido con recursos del Presupuesto de Misiones y fondos federales comprometidos para ésta situación.
Indicaron además que se avanza en resoluciones administrativas para otorgar a trece municipios afectados, un aporte de dos millones de pesos como asistencia financiera, recursos que serán destinados a restaurar la red vial comprometida.
Según reconoció el propio ministro del Agro de la Provincia, José Garay, el mal estado de los caminos representa por estos días uno de los principales inconvenientes que enfrenta el sector, dado que dificulta la salida de producción de las chacras de todo el Alto Uruguay misionero. Por estos días avanza la zafra cañera y la cosecha yerbatera, ambas dependen del buen estado de los caminos para concretarse.
