Después de ser eliminada del Mundial de Fútbol en Brasil, la selección de Corea del Sur volvió a Foz de Iguazú –donde hizo su preparación- y los jugadores aprovecharon el tiempo libre antes de regresar a su país para hacer un extenso recorrido por las Cataratas del Iguazú, una de las siete maravillas naturales del planeta.
El atractivo compartido con la Argentina también disfrutó de la fiebre mundialista. El número de visitantes extranjeros del lado brasileño creció 65 por ciento y durante junio contabilizaron el ingreso de hinchas de al menos 30 de los 32 países que llegaron con el sueño de levantar la Copa.
Además, el canal oficial de la FIFA también hizo una nota especial sobre las Cataratas del Iguazú