A partir de este domingo, el control será estricto. Se trata de los que se empadronaron y a los que le asignaron su ubicación tras un sorteo.
Desde este domingo 1 de junio redoblarán los controles en el cuarto tramo de la costanera posadeña en cuanto a la presencia de vendedores ambulantes. Solo permitirán que comercialicen allí sus productos 76 trabajadores que fueron empadronados por la Municipalidad.
Puntualmente, lo que se busca es que la venta callejera no sea un obstáculo el tránsito de personas ni de bicicletas en la zona del Centro Multicultural. También que no se vendan allí artículos traídos al país de contrabando.
Desde la comuna se informó que lo que se hará “organizar” a los vendedores, “los cuales serán ubicados de forma tal que se realce el atractivo turístico del paseo”.
En realidad, los controles son el paso final de un trabajo que empezó el año pasado, cuando desde la Municipalidad se convocó a los habituales puesteros para que detallaran desde cuándo estaban en el lugar y qué es lo que vendían. La intención siempre fue darle prioridad a los artesanos y a los emprendedores locales, a fin de que exhiban y comercialicen sus productos en un espacio armónico y amigable con los visitantes. “En base a esto, se realizó una primera selección. Después, se depuró ese primer listado para conformar un padrón de 76 personas autorizadas a comercializar sus artículos”, precisó la comuna en un comunicado.
“Se realizarán inspecciones durante los fines de semana para constatar el cumplimiento de las ubicaciones y medidas, como así también los productos que se comercialicen en los puestos empadronados”, añadió.
Una vez que se tuvo el padrón, se procedió al sorteo de las ubicaciones. Es precisamente esto lo que se inspeccionará a partir de este domingo.
