Debate sobre los efectos en la salud y las consecuencias de despenalizar el consumo de Marihuana

Quienes están a favor concurrieron a una marcha el fin de semana en Posadas y pidieron que se deje de ver al adicto como un delincuente para tratarlo como a un enfermo. Sostienen que no genera adicción, sino un “acostumbramiento”. Por su parte, los que la cuestionan advierten de los efectos a largo plazo en la salud. La despenalización  “desarma la autoridad de los padres que se niegan a que sus hijos consuman porque será el mismo Estado el que se lo permita”, sostuvo el médico, Jorge Adrian Guerin. 

 


Nadia Presti referente de Autocultivo en Misiones RADIO LIBERTAD

Radio Libertad. Audio. La gente opina en la calle

Radio Libertad. Jorge Adrian Guerin, médico

A partir de la marcha que se realizó en Posadas y varios puntos del país el fin de semana para pedir por la despenalización de la Marihuana, se abrió el debate con posturas que confrontan entre quienes la justifican y quienes advierten de los daños a largo plazo que provoca esta droga.

 

Nadia Presti referente de Autocultivo en Misiones, una publicación alternativa, defendió la despenalización del consumo al afirmar que de esta forma se deja de ver al adicto como un delincuente para tratarlo como un enfermo.

 

“Venimos a buscar la despenalización más que la legalización, que se permita el autocultivo, queremos terminar con este gran negocio, que el narcotráfico pierda clientes si cada persona puede plantar porque hay que pasar por riesgos para comprarlo, tener contactos con mafias y hay que tomar en cuenta que la guerra contra las drogas no dio resultados, la gente no se muere por consumir marihuana pero sí en las guerras contra las drogas”.

 

Nadia es consumidora de Marihuana desde hace seis años y admite que si bien tiene el control de fumar cuando quiere, no puede hacerlo cuando tiene muchas actividades porque le genera un efecto de “relajación”.

 

“Yo consumo hace seis años, mi relación con la marihuana es que fumo un gramo por día, (un cigarrillo), a veces no lo hago, lo manejo depende lo que necesito, depende lo que puedo, la marihuana me relaja bastante y a veces tengo muchas cosas que hacer entonces no la consumo, pero cada caso es distinto muchos la usan para combatir dolores, por el apetito, o por lo que sea”.

 

La joven asegura que esta droga no genera adicción si no un acostumbramiento de quien eventualmente la necesita y por eso busca fumarla. Asimismo, insistió en que debe darse un debate serio y que la sociedad se plantee porque se cuestiona tanto a la marihuana y no se mide con la misma vara al cigarrillo y al alcohol que son drogas lícitas que matan.

 

Finalmente, habló de la hipocresía de una sociedad que cree que la droga es un problema de la gente humilde y que no siempre en los barrios carenciados están los vendedores. “Nosotros no compramos porque hay que pasar por muchas cosas feas, pero pedimos que si una persona tiene un problema de adicción no vaya a la cárcel a tratarla”.  

 

 

Efectos en la salud a largo plazo

Por su parte el doctor Jorge Adrian Guerin, quien por muchos años trabajó en el centro de rehabilitación para adictos Manatial en Posadas, opinó que los que piden y hablan a favor de  la despenalización y justifican el consumo de esta droga están buscando relativizar y minimizar los efectos que a largo provoca la marihuana, que lleva a la persona a que cada vez necesite más dosis para saciar el efecto inicial de la primera experiencia que se va disminuyendo, entonces con más dosis se busca lograr mantener ese efecto.

 

“La Marihuana es un depresor, pero el tema no es la marihuana sino quien la consume, su personalidad porque no a todos les produce el mismo efecto. Va haciendo que se pierda el interés, y hace que quien consume no tenga ganas de recuperarse, una de las áreas que afecta es la memoria, primero la memoria inmediata, y provoca pérdida de concentración y atención”.

 

El médico entiende que la despenalización va a “abrir las puertas para la facilitación de sustancias más duras”.

 

En tanto, indicó que una decisión así desde el Estado, “desarma la autoridad de los padres que se niegan a que sus hijos consuman porque será el mismo Estado el que se lo permita. No hablemos de un tipo de 40 años, hablemos de adolescentes, de chicos de 13, 14 años, los que hablan a favor lo hacen para excusarse de que están consumiendo”.

 

 

La opinión de la gente

Sobre la polémica, salimos a la calle para hablar con la gente que esto opinaba: 

 

Silvia: “Está mal legalizarla. Hay que tener cuidado porque eso podría aumentar el consumo no solo de la marihuana sino de otras drogas”.

 

Juan: “Por más de que se copie la ley de Uruguay registrándose, esta mal, el que consume lo va a seguir haciendo pero los que dicen que despenalizando se va a terminar con el narcotráfico deben saber que de todo lo que entra por la frontera solo el 10 por ciento va para el consumo interno”.

 

Dámaris: “Está mal legalizar la marihuana, hay que pensar en los chicos, en nuestros hijos, es cierto que el cigarrillo mata más rápido pero eso no es razón para legalizarla. El Estado no debe permitir que se acceda a esta droga”.

 

 

¿Qué ocurre en Uruguay?

Desde este martes el gobierno de José “Pepe” Mujica pondrá en vigencia la ley que reglamenta la marihuana.

El prosecretario de la Presidencia, Diego Cánepa, que hizo el anuncio, reiteró que la marihuana legal será exclusivamente para uruguayos, que deberán estar inscriptos en un registro.

 

La primera partida de marihuana legal que se venderá en farmacias de Uruguay saldrá a un precio de unos 20 a 22 pesos uruguayos (algo menos que un dólar) por cada gramo de la droga, según informó Cánepa. La venta en farmacias al público comenzará luego de las elecciones presidenciales y legislativas del 27 de octubre, y del eventual ballottage del 24 de noviembre.

 

Sin embargo, antes podrán ser autorizados los clubes de cultivadores o los consumidores que deseen plantar cannabis en su propia casa.

El gobierno uruguayo decidió otorgar sólo hasta seis licencias a empresas para producir la planta en cultivos en una superficie máxima de diez hectáreas.

 

El límite de tenencia para no incurrir en delito por tráfico de drogas será de 40 gramos de marihuana por persona.

 

Los Clubes de Membresía serán con una cantidad mínima de 15 socios y un máximo de 45. Éstos podrán plantar en forma colectiva hasta 99 plantas de cannabis. Cada miembro de un club puede percibir hasta 480 gramos anuales de cannabis, según el anuncio.

Las farmacias no están obligadas a vender y las que estén interesadas en integrar la cadena deberán registrarse.

LA REGION

NACIONALES

INTERNACIONALES

ULTIMAS NOTICIAS

Newsletter

Columnas