Con gol de Ernesto Pinti Álvarez venció por 1 a 0 al Taladro y aprovechó los resultados de sus rivales para acomodarse con el promedio. En la próxima fecha visitará al ya descendido Nueva Chicago y luego recibirá al ascendido Olimpo de Bahía Blanca. Con dos triunfos se asegurará la permanencia.
| Crucero del Norte |
Banfield |
| 1 | 0 |
| Finalizado | |
7′ ST. Gol Crucero Ernesto Álvarez
Pasó una de los tres finales que Crucero debía afrontar para mantener viva la ilusión de quedarse en la B Nacional. El triunfo por la mínima diferencia con tanto de Ernesto Álvarez, encontró una sonrisa en medio de una semana complicada y la victoria ante Banfield será aún más valorada si el equipo logra el objetivo de seguir en la categoría.
Con mucha presión, empuje y corazón más que buen juego, el Colectivero se sacó de encima un rival complicado que más allá de no jugar con todos sus titulares, presentó batalla en un reducto misionero con un buen marco de público.
El primer tiempo fue muy parejo y trabado en el mediocampo y los locales no supieron llegar con claridad y Banfield, sin hacer gran cosa, manejó bien el balón pero tampoco generó mucho peligro en el arco de Gaona.
Las llegadas del elenco misionero fueron aisladas y sobre todo con remates de afuera, algunos bien dirigidos pero no con la potencia necesaria y el golero visitante, Germán Caffa, ex jugador de Crucero, respondió a la perfección.
Otra vez Enzo Bruno fue de lo mejor en el conjunto misionero, no solamente por su despliegue y buena predisposición para colaborar en la marca, sino también porque era uno de los pocos que se animaba a algo diferente.
Una y otra vez el oriundo de San Ignacio desequilibraba con sus gambetas pero en los últimos metros no encontraba compañía y todo terminaba en centro o en pelotazo que controlaba con tranquilidad el arquero de la visita, que antes del partido recibió una plaqueta del Club por aquel título logrado con Crucero en 2004, la primera vez que el Colectivero ganó la Liga Posadeña de Fútbol.
Con más choque que juego y marca que otra cosa, se terminó un primer tiempo malo que dejaba abierta la incógnita si Crucero podría doblegar a Banfield y así seguir soñando con la permanencia.
En el complemento el equipo misionero mostró otra actitud y de entrada salió a presionar más arriba a un estático equipo del Sur de Buenos Aires que no encontraba, ni siquiera en los consejos de Almeyda, su entrenador, la manera de generar peligro para Crucero.
A los 7 minutos de esa parte, Lenci recibió un gran pase de Sagarzazu y mano a mano frente a Caffa definió cruzado de zurda y tras el rebote en el arquero, el paraguayo Álvarez no tuvo más que empujarla y así desatar el festejo de los hinchas que llegaron al Andrés Guacurarí.
En medio de tanta alegría por el gol, los simpatizantes se mostraron molestos por un gesto de Lenci hacía las tribunas. Lógicamente el reproche no se hizo esperar y los silbidos comenzaron a bajar para el delantero que sigue sin marcar goles desde la 7º fecha frente a Ferro y en la celebración, hizo un gesto de silencio para los plateistas.
En la mitad del complemento, el entrenador Delfino decidió sacarlo al nueve y hubo cierto grado de apoyo en una especie de reconciliación con más aplausos que otra cosa para el delantero que si bien no jugó un buen partido, corrió y metió mucho y a la larga su labor fue valorada.
Desde ahí Crucero cedió peligrosamente terreno a un Banfield que sin ser claro, manejaba el balón muy cerca del arco de Gaona y se encontró quizas con la situación más clara del juego cuando Silvera recibió un centro perfecto desde la izquierda y conectó un tremendo cabezazo que el arquero local descolgó del ángulo practicamente e hizo que se gritara como un gol.
Luego no hubo mucho más y los minutos finales estaban a un paso de consumir el encuentro y al pitazo final de Ariel Montero, se sumó toda la gente a los festejos de los jugadores misioneros, creyendo que todavía se puede.
Quedan dos partidos (Chicago y Olimpo) descendido y ascendido respectivamente y será cuestión de ganar los dos y seguir en la categoría más allá de los resultados que consigan Independiente de Mendoza y Deportivo Merlo.
Almeyda y el cariño de la gente
El técnico de Banfield se habrá ido seguramente con algo de bronca por la derrota más allá de que su equipo no juegue por nada en las últimas fechas pero con la linda sensación de que en Misiones fue recibido tal como es, un ídolo del fútbol argentino y en cada instante que pudieron, los hinchas en Santa Inés se lo hicieron saber.
Lógicamente camisetas de River esperando una firma del Pelado, poder sacarse una foto o al menos un saludo cercano, las características de la multitud que se acopló en la puerta del vestuario visitante una vez terminado el juego.
La policía debió escoltarlo hasta el micro y en ese lapso saludó a los fanáticos y mostró muestras de agradecimiento por tanto cariño. Otro grande que pisa suelo misionero y deja su huella, ojalá los resultados acompañen a Crucero para que la gente de la tierra colorada siga disfrutando de los grandes ídolos del fútbol, muchos de ellos trabajando en la B Nacional como el Pelado Almeyda.
