Anoche el Chango Spasiuk puso el cierre brillante de la Velada de Gala por el aniversario del 25 de Mayo realizada en el Centro del Conocimiento. También pasaron Legado Regional, Pico Núñez y Pato García.
Alrededor de 1200 personas disfrutaron de la música de esta tierra, con el Chango Spasiuk y los nuevos valores de Legado Regional. Se saboreó locro y empanadas, regadas con buen tinto y concluyó con el himno.
Hoy, 203 aniversario de la Revolución de Mayo, la Patria es agasajada en miles de lugares de las diversas geografías argentinas. Pero muchos ya la tributaron anoche, cuando la frontera del viernes al sábado fue cruzada entonando el Himno Nacional Argentino, que explotó en la garganta de los hombres y mujeres que se sienten bien argentinos. Y donde hubo un festejo, tan multitudinario como la Luna llena que observó desde el negro firmamento, fue en la Plaza Seca del Centro del Conocimiento, en la que más de 1200 personas se congregaron a disfrutar de un espectáculo de enorme calidad.
Fue la Velada Patriótica, organizada por el Área Teatro del mencionado espacio cultural, la que motivó la llegada de más de un millar de misioneros y misioneras, más algunos que vinieron de otras provincias, mucha presencia de correntinos y también, desde la vecina orilla, Encarnación.
La Velada Patriótica, enmarcada por una noche fría, para atemperar los ánimos y el disfrute, esperó a la multitud con locro y empanadas, vino tinto y mucha fiesta en el escenario. La que se inició con las emotivas palabras de Elida Vigo, presidenta del Parque del Conocimiento, dando la bienvenida a tanta gente y al centenar de artistas que engalanó la celebración.
Fueron los bailarines del Ballet del Centro del Conocimiento el que conoció in situ que el rocío iba a jugarles un desafío importante al hacer resbaladizo el escenario. Igual no hizo mella en toda la noche, ya que los que entregaron fragmentos de “Don Quijote” como los elencos de danzas nativas “La Pasionaria” La Zamba “Criollita Santiagueña bailada por Diana Navarro y Carlos Layh; Ballet Raíces Nuevas del Alcázar, la Compañía de Arte Peña Itapúa. Todos entregaron finas estampas, tomando parte del abanico de danzas que se bailan en esta región del país, y no hubo un solo resbalón, muy atentos los trabajadores de la producción secando a cada rato el escenario.
Y fue maravilloso el homenaje a un hombre y una mujer que sintieron a la patria desde la danza folclórica, Santiago “El Chúcaro” Ayala y Norma Viola, un documental a espaldas de los locutores Meza y Andrada, y un desfile de su monumental vestuario coronaron la parte dancística.
Juegos, Legado y El Chango Spasiuk
Mientras muchos circulaban con porciones de locro de aquí por allá, los niños y algunos no tantos, se divirtieron con la Kermesse de la Velada Patriótica, una gran selección de juegos didácticos, de índole histórico/cultural atrapó a los concurrentes, que acertando se llevaron valiosos premios, como los monumentales mates de cerámicas que elaboran verdaderos artesanos en el subsuelo del Centro del Conocimiento.
Hasta que el vértigo, con ese luna llena a pleno mirando desde lo alto, derivó en la música, eminentemente, con ese notable programa cultural que creó la directora del Centro del Conocimiento, Gabily Anadón, bajo idea de Elida Vigo, que es Legado Regional. Un proyecto que se propone revalorizar la gran cantidad de músicas, ritmos y cantos llegados y originados en el proceso de construcción de esta región; recorriendo toda la provincia, dándole lugar a los jóvenes talentos del interior profundo.
Legado presentó de todo un poco y algo más. Polkitas, chotis, vaneron, mucho chamamé, valseado, con los jóvenes músicos apadrinados en el escenarios, como bastión protector, de grandes, de consagrados, como Pato García y su trío, los Hermanos Núñez, Leandro Yahni, Sergio Tarnoswki, Lery Duarte, y la dirección de Fabián Meza. El público aplaudió a rabiar cada obra presentada y ni el frío hizo mover de las sillas a la multitud. Hasta que llegó lo más exquisito del menú, Chango Spasiuk y su formidable banda.
El show del Chango estuvo divido en dos partes, su acordeón sonó antes del Himno Nacional Argentino, cantado por dos formidables promesas de Legado Regional, y después de la canción patria. Tocó mucho de su repertorio, obras de algunos de sus ocho álbumes solistas, de “Polcas de mi Tierra” (1999), de «Tarefero de mis Pagos» , ese que le valió el premio de la BBC de Música del Mundo (Mejor Artista Revelación 2005), y del último, » Pynandi » (Los Descalzos ) lanzado a fines de 2008.
Fue una noche amparada por la luna, historia y la cultura que hemos logrado construir en 203 años y se lo hizo con la Velada Patriótica.
