Diputados del estado de Paraná aprobaron un proyecto de ley para construir cuatro centrales hidroeléctricas. La mayor de ellas se ubicará en el curso del río Iguazú, entre los municipios de Capanema y Capitão Leônidas Marques, a unos 50 kilómetros del vértice noreste de Misiones y a menos de un kilómetro del Parque Nacional Iguaçu, de Brasil.
Un proyecto brasileño que genera polémica entre ambientalistas tanto argentinos como brasileños fue aprobado por la Cámara de Diputados del estado de Paraná. Se trata de la construcción de la represa Baixo Iguaçu, cuyo potencial de generación es de 350 Megawatts (MW). El embalse inundará alrededor de 13,6 kilómetros cuadrados en una zona ubicada a menos de un kilómetro del parque Iguazú del lado brasileño.
La represa se construirá sobre el río Iguazú, entre las localidades de Capanema y Capitão Leônidas Marques, a unos 50 kilómetros de la frontera con Misiones, al noreste de la provincia y a unos 150 kilómetros de las Cataratas.
El proyecto para construir esa represa, junto a otras tres de menor envergadura también en el estado brasileño de Paraná, cuenta con la licencia del gobierno del estado y ya se realizó la licitación correspondiente que fue ganada por el grupo Neoenergía.
