Las estaciones podrán incrementar sus precios hasta equiparar al mayor vigente el 9 de abril en la región.El mecanismo deja a la mayoría de las estaciones un amplio margen para seguir remarcando.
En medio de la polémica generada ayer por el “congelamiento” por seis meses en los precios del los combustibles en todo el país, desde la petrolera YPF, la de mayor participación en el mercado, aclararon que la medida en cuestión no altera su política de precios y que no le impide incrementarlos.
La resolución de la secretaría de Comercio Interior de la Nación establece que el precio tope de comercialización de los hidrocarburos líquidos “será el que resulte igual al más elevado del día 9 de abril del corriente año” en las distintas regiones que componen el país.
Es decir que ninguna estación de servicio deberá bajar sus precios y el tope máximo que deberán respetar todas las expendedoras será equivalente al más alto en la región en la que está inserta. Siguiendo este mecanismo, si por ejemplo alguna estación de servicio del Nea estuviera cobrando 10 pesos por litro de nafta súper, todas las demás estarán habilitadas para elevar el precio de ese combustible hasta ese nivel.
Teniendo en cuenta que en la región hay estaciones de servicio, especialmente las de bandera blanca, que cobran precios muy superiores a los vigentes en las demás, resulta que la gran mayoría de las expendedoras tendrá un amplio margen para continuar aumentando.
En ese sentido, desde la petrolera estatal destacaron que sus precios son “los más bajos del mercado en todo el país, con diferencias muy significativas con la competencia” lo que les deja una amplia brecha para poder corregir sus precios de ser necesario.
La resolución publicada ayer afirma además que “quedará a cargo de las empresas dedicadas a la destilación, comercialización del petróleo y sus derivados, informar para conocimiento de sus clientes el precio más alto en cada región”.
Riesgo de cierre
Faruk Jalaf, presidente de la Cesane, cámara que nuclea a los propietarios de estaciones de servicio del NEA, manifestó que ya venían complicados y asegura que el congelamiento empeorará la situación.
Aseguró que los costos aumentaron considerablemente y que no podrán afrontarlos sin aumentos de precios, principalmente por las estaciones más chicas. “Muchas tendrán que cerrar”, afirmó.
Dijo que el beneficio que dio el gobierno provincial fue disminuir los costos impositivos y gracias a ello se cerraron menos estaciones que en el resto del país. “La presión fiscal es menor en Misiones que en el resto de Argentina”, reconoció.
Raúl Alonso, propietario de estaciones de servicio en Posadas, aseguró que “sin lugar a dudas afectará a la parte de inversiones”. Dijo que no existen garantías de ningún tipo ya que los gremios siguen pidiendo aumento y ejercen una fuerte presión. “Pero habría que hablar con Moreno para ver cómo se maneja esto”, indicó.
Entiende que a las demás estaciones de servicio que no dependen de YPF también deberán alinearse, como lo hicieron siempre, dijo.
