De regreso en Posadas, Jorge Víctor Ríos, el joven misionero que lideró la protesta que obligó a la multinacional de las hamburguesas a modificar su forma de trabajo en Estados Unidos, confirmó que los que estuvieron movilizándose seguirán en sus países con el reclamo por los derechos de los trabajadores. “Nuestra estrategia ahora es hacer de este problema una cuestión global, ya no va a ser sólo en Estados Unidos el problema sino en todos los otros países”, dijo.
Audio misionero sindicalista en EE.UU., Jorge Víctor Ríos. Radio Libertad.
En ese sentido, el joven explicó que aunque la cadena dio marcha atrás y se vio obligada a retirar la franquicia en la cual surgió el conflicto, no cumplieron con el objetivo que se habían propuesto con la organización NGA de reunirse con el CEO de McDonald’s, Don Thompson para discutir otras formas de trabajo.
Ríos señaló que la protesta y el efecto obtenido sientan un precedente en el país norteamericano donde la lógica de trabajo es a favor de la empresa y no de los trabajadores, y donde el Estado pone sus programas de intercambio cultural en manos de las empresas. “Allá se naturaliza a eso de que la empresa es más importante que el trabajador y fue sentar un precedente de que la empresa diera un paso atrás, en cambio para nosotros es al revés”, explicó y agregó “cuando se logró eso la gente lloraba allá, los sindicalistas, los trabajadores”.
Por otra parte, destacó el gran impacto que tuvo el caso en los medios de comunicación estadounidenses, sobre todo en diarios como el Wall Street Journal que sigue una clara línea a favor de las empresas. “Cuando salió toda la noticia, fue gracioso e increíble la repercusión mediática en Estados Unidos, es muy loco porque escribieron un artículo a favor del trabajador en el Wall Street Journal que siempre está favoreciendo a los negocios”, dijo.
Para Ríos, la movilización fue la única opción que les quedaba luego de haber intentado obtener ayuda en todas las instancias y no obtener respuestas. En ese sentido manifestó que lo que más sorpresa y dolor le causó fue la forma en que fue tratado en la propia embajada argentina en Estados Unidos, lo cual motivó su carta a la presidenta, Cristina Kirchner. “Ni en nuestras propias embajadas nos ayudaron, en la mía me hicieron sentir bastante mal. Por eso decidimos salir a protestar”.
Por último resaltó el trabajo realizado por la organización a la cual se unieron para realizar la protesta, la NGA –que surgió después del huracán Katrina, para defender los derechos de los trabajadores latinos-, ya que define muy bien los objetivos a lograr, el mensaje que desean transmitir y a quiénes pretenden llegar. “La idea es seguir trabajando en esto porque, aunque estamos conformes con el quite de franquicia, también es una forma de que McDonald’s se lave las manos. Nuestro objetivo era tener una reunión con el CEO de la empresa, Don Thompson y eso no se cumplió”.
Según dijo a partir de ahora el trabajo en contra de la cadena continuará en los demás países. “Nuestra estrategia ahora es hacer de este problema una cuestión global, ya no va a ser sólo en Estados Unidos en problema, sino en todos los otros países”, aseguró.
Lo que desató el conflicto
Ríos había viajado a Estados Unidos desde Posadas a través de un intercambio cultural que incluía un trabajo. Le tocó una franquicia de Mc Donald’s donde fue explotado junto a otros jóvenes con un salario menor al establecido y viviendo en condiciones de hacinamiento en un sótano compartido con cinco personas. Eso motivó el descontento que derivó en una huelga en la franquicia de Mc Donald’s en Pennsylvania.
Esta situación, poco común en ese país, llamo la atención de los medios de comunicación y la repercusión escaló hasta medios tan importantes como el Wall Street Journal, que realizó dos extensas notas sobre el caso, y otros medios como CNN y ABC News, que cubrieron las protestas.
(Radio Libertad)
