En el acto central de la Semana de la Memoria y con un gesto que fue aplaudido por familiares y víctimas del terrorismo de Estado, el gobernador Maurice Closs instruyó al Jefe de la Policía, Héctor Munaretto, a que retire de la institución símbolos, emblemas, retratos o cualquier otro elemento que sirva de homenaje a jefes, oficiales, o cualquier personal con cargos jerárquicos que hayan ejercido durante los diferentes Gobiernos de facto, más allá de la última dictadura militar.
Radio Libertad: Maurice Closs gobernador de Misiones
En el acto central de la Semana de la Memoria y con un gesto que fue aplaudido por familiares y víctimas del terrorismo de Estado, el gobernador Maurice Closs instruyó al Jefe de la Policía, Héctor Munaretto, a que retire de la institución símbolos, emblemas, retratos o cualquier otro elemento que sirva de homenaje a jefes, oficiales, o cualquier personal con cargos jerárquicos que hayan ejercido durante los diferentes Gobiernos de facto, más allá de la última dictadura militar.
“Es un claro gesto de reconocimiento a las víctimas, actos de reparación moral.” Este Gobierno se alza en rechazo a todos aquellos símbolos, emblemas o cualquier elemento que sirviera para honrar a aquellas personas que ejercieron un rol activo en las dictaduras. A la hora de tomar la decisión hicimos un primer decreto que decía “aquellos jefes del proceso de 1976 a 1983” y lo modificamos, porque la verdad es que la Argentina tomó como natural los golpes de Estado. Estaban esperando cuando sonaban las botas y se abran las puertas de los cuarteles. Esto tiene que ver con todos los que estuvieron al mando de los procesos militares, como en la Rosadita, nuestra Casa de Gobierno, no hay ninguna foto de algún gobernador de ninguna dictadura. No decir nada de los otros, en esa omisión, estaríamos aceptando procesos militares anteriores”, explicó el mandatario en su discurso durante el acto central de la Semana de la Memoria, que sirvió además para señalizar a la Jefatura de Policía de Misiones como un ex centro clandestino de detención.
Closs además destacó el rol de la educación y las fuerzas de seguridad en tiempos democráticos. Minutos después de las 10 encabezó un acto de homenaje a ex alumnos del Colegio Roque González de Posadas, Mariano Zaremba, Carlos Tereszecuk; Néstor Leyes; Arturo Franzen fusilado en Margarita Belén en Chaco; y Hugo Mathot ex sacerdote detenido político.
Los actos fueron encabezados por el mandatario, el ministro de Derechos Humanos, Edmundo Soria Vieta, el jefe de Gabinete, Ricardo Escobar, el de Gobierno, Jorge Franco, Judit Said, directora del Archivo Nacional de la Memoria, el intendente de Posadas, Orlando Franco, familiares y víctimas de la represión, además de legisladores y otras autoridades.
“Haber ido al Roque tiene un enorme valor. Se dejó una placa a sus ex alumnos, que formados en esa escuela llevaron adelante su militancia política y social. Es relevante porque uno llega con un mensaje a una generación que ha nacido en algunos casos, quizás en este siglo. A casi un cuarto de siglo de aquellos tiempos duros. Y si uno quiere un Nunca Más, que haya memoria, verdad y justicia, debe llevar estos gestos a las nuevas generaciones, que deben entender lo triste de ese proceso, lo doloroso de lo vivido por muchos jóvenes y las barbaridades que no se deben volver a cometer”, indicó. “Es fundamental trabajar con estos jóvenes que por primera vez están por ejercer el derecho al voto”, abundó.
En referencia a la señalización de la Jefatura –ubicada en calles Félix de Azara y Tucumán de Posadas- como ex centro clandestino de detención, “tiene que ver con el rol que debe cumplir cada institución”.
“Cuando en la década del 70 se produjo este genocidio sistemático, el mayor problema fue que existió una decisión de Estado, que llevó adelante estas acciones. Un Estado ocupado por actores autoritarios, que usaron herramientas políticas y de la economía, con la fuerza pública, de una manera terriblemente despiadada. Las delegaciones policiales de las provincias estuvieron al servicio de semejante genocidio. Por eso, cuando señalizamos este lugar, señalizamos una época, a las personas de esa época, no a la institución”, argumentó.
“Debemos decir nunca más a las instituciones deformadas. La Policía tiene el monopolio de la fuerza pública y es fundamental que esté al servicio de la democracia. Que lo entiendan quienes forman parte de la fuerza. Porque además el respeto a los derechos humanos no es sólo política, sino cómo se trata un allanamiento, la detención de un joven, de una mujer, el tratamiento a un preso”, indicó.
“Marcamos un lugar histórico para que nunca más se repita. Somos esperanzados de que no se va a volver a repetir”, sentenció.
Previamente, en el colegio Roque González, ante los estudiantes, rindió homenaje a “personas que transitaron estas aulas y aquí aprendieron una visión de la vida, de la política, fuertemente influenciados por el pensamiento cristiano”.
Recordó que “les tocó vivir en una época difícil de la historia, pero sobre todo, muy cruel, cuando la participación en la política y la libertad de opinión, tenía serias amenazas y límites. Eso es lo que tienen que valorar ahora, no solo tienen la posibilidad de formarse en una institución de trayectoria, como los jóvenes que vinimos a homenajear, sino en un tiempo de profunda democracia, este tiempo es un tiempo de mucha participación, de libre pensamiento, se puede opinar, hacer militancia juvenil, como lo hice yo en mi secundaria, también en democracia”.
“Van a salir formados a vivir en una comunidad democrática. Los valores de la democracia, de la participación, de la libertad de opinión, son inclaudicables. El derecho a votar a los 16 fue una decisión del Estado, pero no lleva un solo atisbo de especulación política, por el contrario, son ustedes los jóvenes de esta generación los que tienen la visión más revolucionaria, la visión más crítica, una visión más idealista. Que tengan el derecho de participar, es una ampliación de derechos de esta democracia”, sostuvo.
“Quienes pasaron por estas aulas se merecen este homenaje, porque su vida, su lucha, ha dejado marcas imborrables, en sus familias, amigos, pero sobre todo en una Nación. Una Nación que dice Nunca Más a la agresión, la opresión, muerte, miedo. Y sí a la posibilidad de expresarse, de luchar por los sueños. Y que esa pelea y participación, pueda darse a más temprana edad. Nosotros vamos a seguir trabajando por la paz. La paz no sale de casualidad. Si uno mira la historia de la humanidad, gran parte del tiempo fue dominada por las guerras y la opresión. Incluso la Argentina. Por eso en cada acción de Gobierno, siempre pensamos que la paz es el valor principal que orienta la vida en común del pueblo de Misiones. Tengan jóvenes, la certeza, que mientras estemos en el Gobierno, vamos a trabajar para que puedan participar, para que puedan expresar sus intereses. Y para que cuando salgan, salgan a una comunidad que les permita vivir y crecer en paz”, se despidió.
