Reflexión dominical del pastor Guillermo Decena

En Estados Unidos, los informes de salud aseguran que unas 4 millones de personas recurren al psiquiatra cada año, y según estadísticas unas 2 mil personas se suicidan cada día en el mundo. Y es que la depresión  es la enfermedad de nuestros tiempos. Pero los cristianos no debemos desmayar  como si no tuviéramos esperanza, tenemos recursos en la Palabra de Dios para tomar posiciones y vencer cualquier circunstancia adversa, sabiendo siempre como dice la Biblia: Si Dios es por nosotros, quien contra nosotros?

Hoy vamos a ver “A no desmayar, parte III”, porque entendemos que la depresión  es la enfermedad de nuestros tiempos. El desánimo inunda

los corazones, y hace que la gente se sienta desmotivada para seguir adelante. En este marco, informes de salud de Estados Unidos aseguran que 4 millones de personas recurren al psiquiatra cada año, y unas 2 mil personas se suicidan cada día en el mundo.

En la Biblia también Dios nos habla de la depresión, por ejemplo Moisés y Elías sufrieron bajones emocionales. Y es que los cristianos podemos padecer algún tipo de bajón emocional pero no debemos desmayar como si no tuviéramos esperanza, tenemos recursos en la Palabra de Dios para tomar posiciones y vencer cualquier circunstancia adversa.

Porque como dice Romanos 8:31 “Si Dios es por nosotros, quien contra nosotros?”

El autor del salmo 42 padecía depresión (leer Salmo 42), pero podemos sacar soluciones por medio de la ayuda y enseñanza del Espíritu Santo. Tenemos que cambiar el enfoque para vencer.

1)      En el Salmo 42, vs 2-3 9 y 11 sus preguntas no fueron respondidas. Por qué?, por qué?, por qué?,  hay muchas cosas que evidentemente no

tienen sentido racional  en la vida pero si tienen explicación en el ámbito espiritual .

En la Biblia hay un libro denominado  Eclesiastés, cuyo tema principal es la búsqueda de sentido, del significado en la vida. Y a lo largo de

todo el libro, el autor va transitando  los mismos caminos que cualquiera de nosotros hemos caminado, buscando saber para qué existimos, para qué estamos en este mundo. El autor es Salomón , que se dio cuenta, a partir de la sabiduría que había recibido, que su vida no tenía sentido; que estaba vacío.

Eclesiastés 1: 2 “Vanidad de vanidades, dijo el Predicador; vanidad de vanidades, todo es vanidad”. Sentía que todo es vanidad; que nada tiene relevancia o importancia; que no hay nada en la vida que realmente valga, que a través de ningún logro ni de ninguna actividad podemos llenar ese vacío interior, de verdad. Es por eso que en Eclesiastés el capítulo 2, verso 17, decía:

Aborrecí, por tanto, la vida, porque la obra que se hace debajo del sol me era fastidiosa; por cuanto todo es vanidad y aflicción de espíritu.

 

Todo es vaciedad, dice, todo es vanidad y aflicción de espíritu. Aborrecí la vida. Este hombre decía: si esto es la vida, yo no la quiero vivir. Si vivir es existir con esta sensación de vacío, de languidez espiritual, con este hueco interior, entonces la vida no vale nada.

Probó Salomón de todo empezando por el trabajo y dándose a todo el placer que tuvo, tuvo además de riquezas, muchísimas mujeres, pero no

logró jamás saciar su vacío interior. Y finalmente Salomón sacó una sencilla conclusión, que la vemos en Eclesiastés 12: 13, el fin de todo el discurso oído es este: teme a Dios, y guarda sus mandamientos; porque esto es el todo del hombre.

Que bueno es andar por fe y no por vista, sabiendo que en Dios están las respuestas a nuestros dilemas, pero si Dios no nos da algunas respuestas, tenemos que confiar de todas maneras y esperar…

Colosenses 2:3: en Cristo están las respuestas a todos los misterios.

 

2)      Salmo 42 Vs 3: Lloraba de día y de noche, la tristeza Perdió las ganas de comer, y eso conduce a que puede perder las ganas de vivir. La Biblia dice que “Dios pone la mesa en presencia de nuestros angustiadores”, o sea nos da posibilidad de disfrutar de

todas las cosas. Pero el salmista no tenía satisfacción emocional, estaba rodeado de gente pero se sentía solo. Jesús le preguntó a María Magdalena cuando lloraba frente a su sepulcro: Mujer, ¿por qué lloras? ¿A quién buscas? En efecto, no es para llorar, al contrario es para estar alegres por la resurrección, por eso es importante entender que debemos confiar y fortalecernos en Cristo a pesar de lo que ocurra. Porque dice la Palabra de Dios que “para los que aman a Dios, todas las cosas cooperan para bien”.

Salmo 30:11 “Has cambiado mi lamento en baile; desataste mi cilicio, y me ceñiste de alegría”. Viví cada día y renovate con la alegría que te da Cristo, Él saca la tristeza y es quien te ama y nunca te dejará, nunca te fallará!

 

3)      Pensar excesivamente en uno mismo. En los salmos 42 y 43 hay 51 pronombres personales, usa la palabra Yo 14 veces, mi 15 veces y mío 21 veces, solo menciona a Dios cerca de 20 veces.

Quita tus ojos de vos mismo! El egoísmo es causa, principalmente de depresión, hay personas que si no ven sus planes cumplidos, se

desarman, les ataca la depresión. No somos justos cuando nos enojamos por lo que no alcanzamos. Quienes somos nosotros para enojarnos porque Dios no nos complació? Debemos reconocer a Dios en todos nuestros caminos, Proverbios 3:6  “Reconócele en todos tus caminos, y El

enderezará tus sendas”.

Romanos 8:28  “Y sabemos que para los que aman a Dios, todas las cosas cooperan para bien, esto es, para los que son llamados conforme a su

propósito”. Y si evidentemente las cosas no salieron, no lo olvides “…todo nos

ayuda a bien”.

 

4)      Deja la melancolía, deja el pasado atrás, y mira hacia delante. Salmo 42, versículo 4: Se acordaba de las cosas de su pasado. Recordaba cuando estaba como líder. Y eso no sirve de nada. Filipenses 3:12  No es que ya lo haya alcanzado o que ya haya llegado a ser perfecto, sino que sigo adelante, a fin de poder alcanzar

aquello para lo cual también fui alcanzado por Cristo Jesús. Hay que tener una Visión nueva y mirar con optimismo hacia delante.

Los israelitas se quedaron en el desierto cuarenta años porque no podían ver la visión de Dios para sus vidas. Todo lo que pensaban se

basaba en el pasado.

Isaías 43:18-19 dice: “Olviden las cosas de antaño; ya no vivan en el pasado. ¡Voy a hacer algo nuevo! Ya está sucediendo, ¿no se dan cuenta? Estoy abriendo un camino en el desierto, y ríos en lugares desolados”(NVI). Dios siempre está haciendo algo nuevo. Tenemos que  seguir su Plan y dejar de seguir nuestros propios pensamientos y sentimientos. Mira por encima de la circunstancia pero mantené fija tu vista en Jesús. Él

sostendrá tu vida.

El servicio a Dios y a su prójimo hace que podamos superar toda depresión y no desmayar. Al servir  al prójimo dejaremos de mirar el pasado, dejaremos de pensar excesivamente en nuestra propia vida, y el llanto y sufrimiento de tanta gente minimizará nuestro egoísmo. Así lentamente encontraremos respuestas para muchos de nuestros interrogantes… ojalá puedas ponerlo en práctica, que Dios te bendiga!

 

Pastor Guillermo Decena, Centro Familiar Cristiano Eldorado.

Predicas en vivo los miércoles y domingos 20 horas, a través de

www.centrofamiliarcristanoweb.org

 

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