En el umbral del caos (*)

Miguel Schmalko, consejero y ex presidente de la FEBAP.

Miguel Schmalko, consejero y ex presidente de la FEBAP.

«Están sucediendo cosas inverosímiles en nuestra querida Posadas, a la que debiéramos llamar Roque González de Santa Cruz», dice el consejero y ex presidente de la Federación Económica Brasil-Argentina-Paraguay (FEBAP), Miguel Schmalko, en un escrito enviado a la Redacción de Misiones On Line.

Textual

 

1)      Cortes en el puente Posadas/Encarnación: Desde hace algunos días un grupo de piqueteros, que dicen ser numerosos, exigen fuentes de trabajo y canasta alimentaria. El gobierno Provincial, con justa razón,  se niega a dialogar, mientras mantienen el cierre del puente. En fotos publicados por los periódicos, el fin de semana se veía a una familia con hijos, sentados bajo una sombrilla playera, tomando jugos o tereré y otra persona con una carpa de camping haciendo siesta junto a un trozo de madera cerrando el acceso al puente. A ambos lados, grupos de una 20 gendarmes resguardando la seguridad de los acampados, conteniendo a las 20.000 personas que cruzan diariamente el puente, integradas por  turistas, comerciantes, paseros que viven del intercambio de productos , enfermos que acceden a centros de salud de Posadas,  etc. etc.y que ven obstaculizadas sus tareas habituales. ¿ Qué pasaría si los afectados forman una Comisión anti-piquete y coordinan una marcha de 5.000 o 10.000 personas afectadas, marchando desde ambos extremos para despejar los obstáculos ?.  ¿Habría en misiones, reuniendo todas las fuerzas de seguridad de la Provincia capacidad de contenerlos? ¿ Acaso abrirían fuego con sus armas para producir una matanza que no solo afectaría a sus instituciones, sino que significaría la caída del gobierno provincial y muy probablemente el gobierno nacional?  Para meditar.

2)      Los cortes del Puente Zaimán. Otros de los puntos críticos usados por los piqueteros es el estratégico acceso por el Puente Zaimán , ya que el estrechamiento que se produce en el mismo, permite el corte con 10 o 20 personas con las mismas características que se dan en el Puente Posadas/Encarnación, obligando a largos desvíos para llegar a la ciudad y que últimamente se crean sucursales piqueteras para cerrar totalmente el acceso a la ciudad. A Ambos lados del corte, kilómetros de vehículos que quieren acceder a la ciudad para el abastecimiento diario de alimentos, insumos industriales ,trabajadores de Candelaria, Garupá Villa Lanús y muchas otras localidades que tienen su lugar de ocupación en la ciudad de Posadas. .Aquí los reclamos guardan relación con diversas peticiones: Pérdida de trabajo por cierre de una empresa o fábrica, reclamos a Yacyretá o al Iprodha por las viviendas entregadas que tienen goteras y la pintura se ha deteriorado a lo largo del tiempo, que el dinero que reciben de los planes sociales no les alcanza para llevar una vida digna, que las bolsas de navidad que reciben gratuitamente tienen un solo pan dulce, etc. etc, . .  La mayoría de los reclamos son contra la Entidad Yacyretá que en teoría, atiende a los afectados por la represa, como también es verificable que la inmensa mayoría de ellos nunca vivieron cerca del río  y se encuentran en los alrededores de Posadas proviniendo  del interior de la geografía misionera, algunas veces promovida  por políticos inescrupulosos que les prometen trabajo, electrodomésticos etc. si votan por los mismos y otras por la escasez de trabajo en algunos lugares del interior .

          Cada uno de estos reclamos, justos algunos, inverosímiles otros, tienen un destinatario específico y a ellos deben recurrir los que creen que sus derechos han sido vulnerados, pues les ampara el derecho constitucional de peticionar, pero sin vulnerar el derecho de los demás y sin cometer actos ilegales penados por la Ley. Lo notable de esto es que cada una de las acciones que desarrollan, configuran un delito y están penados por la Ley, pero ¿Dónde están los encargados de hacer cumplir la Ley? Apareció uno, el Juez de Instrucción No.6 Ricardo Balor que tuvo el valor de iniciar acciones tendientes a poner un orden en este intríngulis de joda para unos, y drama para otros. El corte pareciera tener origen en una promesa incumplida al cabecilla del piquete, empleado público, con buen sueldo, al no habérsele otorgado una Dirección General o Ministerio en el Gobierno de Misiones. Muchachos, ¡a cumplir las promesas si no quieren problemas!

        La inmensa mayoría de los protagonistas de los cortes y sus familiares tienen planes sociales, reciben fondos de desempleo, Planes jefes y jefas de Hogar, Maternidad, Madres solteras, asignación universal por hijo y muchos otros, que les permiten estar todo el día en la calle sin tener que preocuparse por conseguir alguna changa para acercar alimento a sus hijos y en ese no hacer nada más que obstruir el trabajo de los demás, en una actitud perversa, se hacen acompañar por madres con hijos pequeños que son puestos delante del piquete, como método de acción psicológica para no ser agredidos por los viajeros, actitud que desnaturaliza la vocación de padres pues lo natural es arriesgar la propia vida para proteger a los hijos. Cuando estas actitudes persisten en el tiempo, generan en los destinatarios, efectos de inmovilismo social y deterioro de la conciencia ciudadana y cuando se les ofrece trabajo, que es el reclamo de los asentados del puente, es difícil que los acepten, pues han perdido la vocación de ganar el pan con el sudor de la frente.

       Si consideramos desde otro punto de vista los efectos perniciosos de los cortes de puentes o rutas, elevan los costos de la producción y servicio de Misiones cuyas consecuencias son quitarles competitividad y productividad a las empresas con la consecuente pérdida de mercados externos no afectados por los vaivenes devastadores de lo que sucede en nuestra Provincia con el corolario de quiebras y despidos en las empresas que paradójicamente son fuente de engrosamiento de los movimientos de protesta que no tienen muchos problemas, pues todos están cubiertos por los distintos planes sociales que les permiten vivir sin trabajar.

(*) Miguel Schmalko, consejero y ex presidente de la Federación Económica Brasil-Argentina-Paraguay (FEBAP)

 

 

 

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