Hay buenas expectativas de crecimiento para la producción de caña

Esta iniciativa generó muy buenas expectativas entre los productores de la cuenca cañera, quienes manifestaron que recuperaron la confianza en el ingenio azucarero. Juan Vacaro, un cañero de Panambí, quien había sembrado en una ocasión una hectárea de caña de azúcar pero el bajo rendimiento económico, comparado con el tabaco, lo llevó a elegir este último, recordó: «la vez que planté no tenía recursos. Ahora tengo más recursos, el instructor del ingenio me ayudó, me dieron la semilla, me están acompañando, me financiaron y por eso voy a plantar más».

 

  
Oscar Becker, cañero de Mojón Grande, también expresó su entusiasmo en aumentar la plantación de caña. Recordó: «antes nos hacían promesas, cuando asumió el nuevo presidente del IFAI yo le dije: mire, nosotros somos productores cañeros pero si nos van a versear que van a arreglar el ingenio, no habrá siembra, no podemos estar plantando porque sí, esto lleva mucho trabajo”.  
«Se pusieron las pilas y eso nos da un poco  más de confianza, nos dan ganas de seguir trabajando. Estamos muy contentos porque hay un nuevo proyecto y un cambio que será para bien. La situación va a mejorar el año que viene, porque se plantó más caña”. Jacinto Reis, también de Mojón Grande, consideró que “ahora tenemos una nueva posibilidad para poder quedarnos en la chacra y seguir sembrando caña”.  
Los intendentes de la cuenca cañera también se mostraron expectantes por el incremento de hectáreas sembradas con caña. El alcalde de Mojón Grande, Jorge Ricardo Prychoda, contó que “después del convenio con la empresa tucumana, tenemos un optimismo bárbaro y ganas de seguir trabajando con nuestros productores en la plantación de caña”. Aseguró que “se nota el cambio, hay confianza en los productores  cuando ven estas grandes inversiones que hará la Provincia”. 
En tanto, el jefe comunal de San Javier, Rubén De Lima Natividade, había valorado en su momento el acuerdo y afirmó que “obviamente hay esperanza entre los productores y esfuerzo porque son quienes realmente llevan adelante la producción”. Y agregó: “al aumentar la capacidad del ingenio hay garantía de que toda la caña plantada tiene un destino asegurado, entonces así el productor tiene un incentivo para plantar más”.

 

 

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