Una pedrada en la cabeza, le produjo al cabo David Cáceres (29) hundimiento de cráneo. Ocurrió en Posadas, el pasado 7 de octubre, en una gresca.
Médicos aún evalúan cuáles son los posibles secuelas que podrían quedar en el cabo de Policía, David Cáceres, quien el pasado 7 de octubre, en medio de un procedimiento por una gresca entre vecinos, recibió una pedrada que le produjo hundimiento de cráneo entre otras lesiones. Luego de quince días de internación, el uniformado prosigue con un estricto tratamiento desde su domicilio.
Gresca y agresión
El pasado domingo 7 de octubre, minutos antes de la medianoche, Cáceres fue víctima de pedradas y botellazos que lo impactaron tanto a él como a sus camaradas, quienes sufrieron heridas leves, en medio de una gresca vecinal en Ituzaingó y calle 95 de Posadas. La intervención policial se dio cuando vecinos denunciaron que un grupo de más de 20 personas, todas alcoholizadas, se enfrentaban sobre avenida Ituzaingó y calle 95 de Posadas. Ante la presencia policial, se tornaron agresivos y comenzaron a atacar a los uniformados, a pedradas, botellazos y con distintos objetos, recibiendo el cabo Cáceres, un golpe en la cabeza que lo dejó desvanecido, mientras que otros camaradas que intentaban retirarlo también fueron ferozmente golpeados. Otro grupo se ocupó de destrozar los móviles que terminaron con cristales rotos y abolladuras en toda su estructura. Después de varios minutos, finalmente escaparon, aunque dos de ellos fueron detenidos. El policía herido fue evacuado al hospital Ramón Madariaga y luego al I.O.T. donde fue intervenido quirúrgicamente y quedó internado en terapia intensiva con riesgo de vida. Trascendió que en el primer móvil del Comando Oeste, que llegó para intervenir, estaba el cabo Cáceres, el oficial principal Rubén García; el sargento primero, Víctor Herrero; otro sargento identificado como Juan De Olivera y dos agentes más, todos quedaron bajo una “lluvia” de objetos contundentes.
La causa sigue abierta
Aunque fueron liberados, un soldado voluntario y un policía Federal siguen supeditados en la causa intervenida por el Juzgado de Instrucción Nº7.Los sospechosos habían sido apuntados por testigos, incluso por personas que habrían intervenido en la trifulca violenta de avenida Ituzaingó y calle 95. Dos días después del ataque, el efectivo policial había sido aprehendido al salir de su casa, mientras que el soldado fue llevado por sus propios superiores a la comisaría. En primera instancia, el juez José López ordenó la liberación de ambos, aunque podrían pasar por rueda de reconocimiento, una vez que Cáceres esté en condiciones de hacerlo. No obstante, se cree que el agente no recuerda a sus agresores.
