El cuñado de Mauricio Macri, Néstor Leonardo, pidió el juicio oral y público para el jefe de gobierno como presunto “jefe” u “organizador” de una asociación ilícita dedicada a la intervención ilegal de líneas telefónicas, confirmaron fuentes judiciales.
El cuñado de Mauricio Macri, Néstor Leonardo, pidió el juicio oral y público para el jefe de gobierno como presunto “jefe” u “organizador” de una asociación ilícita dedicada a la intervención ilegal de líneas telefónicas, confirmaron fuentes judiciales.
El cuñado de Macri, a través de su abogado Luis Conde, contestó la “vista” que le corrió el juez federal Norberto Oyarbide, quien hace un par de semanas requirió la opinión de las partes sobre la clausura del sumario y su elevación a la etapa plenaria.
La decisión se tomó sin esperar que la Cámara Nacional de Casación, máximo tribunal penal del país, confirme o no el procesamiento de Macri por «asociación ilícita e interceptación de comunicaciones», debido a que ya pasaron más de dos años sin ninguna decisión al respecto, informaron fuentes judiciales.
Macri, que según Leonardo ordenó las escuchas ilegales a su cuñado, tiene procesamiento confirmado como supuesto “miembro” de la asociación ilícita.
El otro caso que se le atribuye al jefe de gobierno porteño es el que tiene como supuesta damnificado a Sergio Burstein, familiar de una de las víctimas del atentado a la Asociación de Mutuales Israelitas Argentinas (AMIA).
Las fuentes consultadas dijeron que la semana próxima vence el plazo para que contesten la “vistas” casi una decena de querellantes que intervienen en la causa que tramita Oyarbide con la intervención del secretario federal Gustavo Russo.
A continuación el magistrado deberá recabar la opinión de las defensas de todos los procesados, entre ellos el ex jefe de la policía Metropolitana, Jorge Palacios y la del sindicado espía Ciro James.
En la causa también están procesados el ex ministro de Educación porteño Mariano Narodowski; el exjuez de Misiones, José Luis Rey, la ex secretaria judicial Mónica González, y los policías Raúl Rojas, Diego Guarda y Rubén Quintana.
