El subsecretario de Transporte de la Provincia, hermes Almirón indicó que la cantidad de hora de cada chofer o empleado que sube a un colectivo, lo controla el ministerio de Trabajo con operativos que se hacen habitualmente «ya que ellos son los únicos que actúan como la policía de trabajo que controlan si todos los aspectos del trabajador están en orden, desde que si están en blanco y si cuentan con todas la documentaciones correspondientes».
Hermes Almirón, subsecretario de Transporte de la Provincia en Radio Libertad
En referencia a la tragedia de Caraguatay, Almirón consideró en radio Libertad que «no hay antecedentes cercanos de la magnitud de este accidente. En el tema de los controles, «el estado controla no solo los horarios que se le dan en concesiones a la empresas que prestan los servicios de viajes, sino también que las unidades de dichas empresas estén en condiciones, que tengan las documentaciones correspondientes, las verificaciones técnicas, los seguros, la venta de pasajes y que se respeten la paradas», etc.
En otro aspecto también dijo que «se controla que los choferes y los guardas tengan todas las habilitaciones, como el carnet de conducir y todas esas cuestiones. En cuanto a la cantidad de pasajeros del micro que colisionó contra el camión y causó hasta el momento siete muertes, que por ser un servicio de media distancia (Iguazú-Posadas), «en la salida se registra la cantidad de personas que suben pero en el camino lo hacen otras tantas más y se hace casi imposible saber cuantas viajaban al momento del siniestro».
También dijo que «nosotros controlamos que haya, como lo dice la ley, hasta dos personas paradas por cada fila de colectivo, pero como son más de 300 las unidades que circulan diariamente por la provincia es imposible controlar que este aspecto se cumpla en todos los caso». Para finalizar consideró que a veces la propia gente se molesta cuando se detiene a un micro con exceso de pasajeros, porque como pagaron el pasaje quieren viajar como sea y llegar rápido a destino».
