Abogado posadeño nieto del primer aviador misionero se abre camino en Europa

Luis Quaranta y su esposa en Alemania, piensan volver a Misiones.

Luis Quaranta y su esposa en Alemania, piensan volver a Misiones.

Se trata de Luis Francisco Quaranta, de 35 años, quien con su esposa Andrea Vallejos, oriunda de Eldorado se recibieron de abogados en la Universidad Católica sede Posadas, y se marcharon a Europa “ buscando un crecimiento en lo profesional y personal, un cambio trascendental en nuestras vidas». Se radicaron en Basel, al sur de Alemania, en la frontera con Suiza y Francia, donde Luis está haciendo un posgrado en materia de Propiedad Intelectual, en la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual. Recordó con orgullo que lleva igual nombre y apellido de su abuelo, cuya memoria se perpetúa en la avenida Quaranta en Posadas, en homenaje a haber sido el primer aviador sanitario en Misiones.

Enfrente del edificio de la ONU, la silla sin una pata, simbolo de la lucha contra las minas antipersonales donde hubo guerra.

Enfrente del edificio de la ONU, la silla sin una pata, simbolo de la lucha contra las minas antipersonales donde hubo guerra.

Luis Quaranta, en la vereda del edificio de la ONU en Ginebra.

Luis Quaranta, en la vereda del edificio de la ONU en Ginebra.

Luis Quaranta, de 35 años nació en Posadas,  pasó su niñez y adolescencia en el barrio de la Torre Iprodha -Sarmiento y 25 de Mayo-, cursó los estudios primario y secundario en la Escuela Normal Mixta EEUU del Brasil, los universitarios en la Católica de Santa Fe, sede Posadas, donde obtuvo el título de abogado.

Casado con una misionera oriunda de Eldorado, de 38 años, también abogada egresada de la Católica de Santa Fe, sede Posadas,  es docente en Basel donde enseña español en una cooperativa y estudia un Master en Educación, la pareja sin hijos aún.

 

 

El viaje a Alemania

Luis cuenta que al culminar sus estudios universitarios en 2008 decidieron viajar a Europa, “ buscando un crecimiento en lo profesional y personal, un cambio trascendental en nuestras vidas, decidimos emprender tamaña empresa, no estaríamos solos, tenemos familiares germano argentino residentes allí hace muchos años, quienes nos respaldaron y animaron en la decisión, ni bien llegados nos avocamos de lleno al estudio intensivo del alemán y el inglés”.

 

Posteriormente comenzó con los estudios de posgrado en materia de Propiedad Intelectual en la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual  (Ompi) o Wipo por sus siglas en inglés, organismo que forma parte de Naciones Unidas con sede en Ginebra, Suiza.

 

Los estudios abarcan temas como patentes, marcas, diseños industriales, biotecnología, entre otros.

 

Desde noviembre del 2008 residen en Basel, al sur de Alemania, en la frontera con Suiza y Francia. Luis cuenta con la doble ciudadanía argentina-italiana, lo que le facilita mucho el poder permanecer en Europa.

 

Acerca de si piensa establecerse definitivamente o regresar a trabajar a Misiones, contestó que ”es muy pronto para responder esta pregunta, día a día, el tiempo dirá”, y que “no me olvido de quién soy, de mis orígenes, de mi Posadas querida, del sufrimiento de mi gente, la cultura, la idiosincrasia, todo, al estar lejos de los afectos, tanto tiempo es muy duro”.

Con su esposa piensan que “la prioridad son nuestros estudios y en un futuro volver para volcar todo lo aprendido en Misiones, con nuestra gente, por lo pronto volveremos de vacaciones y/o por trabajo”, aseguró.

 

El abuelo fue primer aviador sanitario en Misiones

Luis Quaranta también reveló su parentesco con el nombre de la avenida Quaranta en Posadas. “Puedo decir con mucho orgullo y admiración que se trata de mi abuelo paterno, es un orgullo para mí llevar el mismo nombre, Luis Francisco Quaranta”.

 

Lo calificó como “un hombre generoso y altruista, fue el primer aviador de la provincia de Misiones, piloteaba el primer avión sanitario de uso civil del país, y tuvo la suerte de volar con Antoine de Saint-Exupéry, autor del Principito, cosa que muy pocos misioneros saben, salvó muchas vidas en tiempos difíciles en los que no contábamos con la infraestructura vial necesaria, llevando a los enfermos más graves a Buenos Aires.

 

 

También tuvo familiares diplomáticos, el caso de su tío abuelo, Juan Constantino Cuarenta (así con C, aunque el apellido de Luis es con Q, producto de una larga historia que prefirió contar en otro momento), pero fue el primer jefe de la Side y embajador en Panamá y Bruselas en Bélgica.

 

 

Aparte de los estudios, reparte su tiempo en trabajar en un estudio jurídico en Basel, y una empresa familiar de farmacias , quiso agradecer especialmente a la familia Leyh en Alemania, “que nos apoyan día a día”.

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