El secretario de Obras Públicas de Iguazú, ingeniero Miguel Vega destacó la recuperación del ex basural y el trabajo conjunto para controlar el avance del caracol gigante. En el predio recuperado quieren construir una pista de carreras
El Secretario de Obras Públicas de la municipalidad, Miguel Vega, adelantó que se sigue trabajando en la recuperación del terreno donde funcionaba el basural a cielo abierto antes de la puesta en marcha de planta de clasificación y reciclaje. En ese lugar, bajo grandes capas de tierra se están depositando los caracoles gigantes que por recomendaciones de las autoridades sanitarias se están retirando de la ciudad.
“El caracol africano se encuentra especialmente en las zonas bajas de Puerto Iguazú, se lo recoge a través de empleados municipales y se los trae a esta zona para enterrarlos y eliminarlo porque son vector de enfermedades”, destacó el funcionario.
En la actual administración municipal, el sector donde estaba el basural fue saneado, se enterraron los residuos restantes y ahora está quedando todo limpio.
Para aprovechar este espacio Vega destacó que el proyecto es construir un circuito de motos y karting, como así también de autos chicos para que a través de un convenio con el municipio se pueda desarrollar esta actividad que nuclea a mucha gente de distintas edades.
“Este trabajo nos va a permitir cuidar este lugar que ya es un patrimonio de toda la ciudad, el cual tiene paisajes privilegiados”, contó.
La zona linda con la planta de tratamientos de líquidos cloacales que podrá ampliarse por módulos de acuerdo con la cantidad de habitantes de la ciudad, pero se estima que aproximadamente en 20, 25 años recién se llegaría a la zona donde se prevé instalar el circuito.
“Son aproximadamente 6 hectáreas útiles donde se pueden desarrollar distintos tipos de circuitos, inclusive se está viendo la posibilidad de hacer una recta para picadas y que se venga a desarrollar esa actividad acá, porque además estamos a sólo unos 5 kilómetros del centro de la ciudad”, argumentó.
Una megaobra de 60 millones para terminar con los líquidos cloacales en Iguazú
